PÚBLICO.ES | Alfons López Tena 2007/12/14
Pataleo español
De nuevo, con la reiteración de la estupidez impotente, los Estados europeos han hecho de todo para impedir la independencia de una nación europea, actitud infame que comenzaron con los países bálticos y caucásicos y en la que llegaron a colaborar con el genocidio, vergüenza que les abruma. De nuevo, fracasan.
Es una secuencia conocida: una nación europea dependiente toma la decisión de independizarse, los Estados europeos se niegan y apelan a algunas mentiras y a la estabilidad (algunos, como España, por no poner las barbas a remojar, y otros por la desidia de la impotencia), América apoya, como siempre, la independencia, y el tropel europeo se alinea, bien por principio democrático -como los nórdicos y demás protestantes-, bien por no tener más remedio, con algún pataleo de los más irrelevantes, como España.
Es una dinámica suicida, porque más les valdría que la independencia llegara de su mano que de la de América. (...) Si tan bueno es no ser independiente, ¿por qué España no se disuelve y se integra en Francia?
Es el sino de Europa, que no pierde ocasión de apoyar a los carceleros (...). Felicidades, Kosovo. Gracias, América. Catalunya ya ha cogido turno.