La compañía Ur celebra veinte años en escena con un viejo amigo: Shakespeare
Si esto fuese Catalunya, a estas alturas posiblemente tendrían un teatro propio o dirigirían, digamos, la compañía nacional vasca. Pero, como muchos otros, tuvieron que buscarse las alubias en otros sitios. Ha llovido mucho desde aquellos inicios en la escuela de teatro de Errenteria, dos décadas de vida de la compañía Ur que, algunos de sus miembros fundadores y profesionales que han pasado por su producciones, celebran ahora de gira.
Amaia EREÑAGA | DONOSTIA
El Palacio de los Festivales de Santander acoge esta noche el estreno de «Dos caballeros de Verona», la comedia de William Shakespeare con la que se conmemoran los veinte años de Ur Teatro, una de las compañías vascas que mayor reconocimiento y premios ha cosechado. El gran autor británico siempre le da dado buen resultado a Helena Pimenta, directora y fundadora de la compañía, quien se ha convertido en una de las mayores conocedoras de la obra el dramaturgo inglés -ha recibido una veintena de premios por ese motivo- y en una de las directoras de mayor prestigio del Estado español.
Para Ur hubo un antes y un después de «Sueño de una noche de verano», ya que, con su versión nada respetuosa y sumamente creativa de la obra de Shakespeare, obtuvieron en 1993 el Premio Nacional de Teatro. Eran los primeros años de la compañía, fundada en 1987 en la activa escuela de teatro de Errenteria, en la sala Niessen. Helena Pimenta era, por aquel entonces, profesora en el instituto. Con «Sueño de una noche de verano» se iniciaba una larga y fructífera «relación» con el llamado Bardo de Avon, de la que fueron testigos «Romeo y Julieta» (1995), «Trabajos de amor perdidos» (1998), «La tempestad» (2004) y «Coriolano» (2005). La carrera como directora de Helena Pimenta durante todo este tiempo se ha extendido a otras compañías -entre las que se encuentra el Teatro Nacional de Catalunya o la Compañía Nacional de Teatro Clásico-, para las que ha dirigido montajes relacionados principalmente con relecturas de autores clásicos, aunque también ha coqueteado con contemporáneos, como «El chico de la última fila», de Juan Mayorga.
Ahora han decidido celebrar las dos décadas de Ur con un montaje en el que recuperan al Shakespeare más joven y con una gira que les traerá el próximo mes de enero al Teatro Arriaga de Bilbo. De momento, esta es la única fecha atada en Euskal Herria. Por cuestiones del teatro y de la vida, la obra la estrenan en Santander debido a que el Palacio de los Festivales de Cantabria participa en la coproducción del montaje, junto con la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Fuenlabrada. Los ensayos, que arrancaron el pasado mes de setiembre, se han desarrollado precisamente en el teatro de esta localidad madrileña.
¿Y por qué una comedia de juventud, menor en cierta manera, en lugar de uno de los grandes clásicos de Shakespeare? «Hemos optado por un Shakespeare joven para no olvidar la necesidad de una mirada principiante, inocente y llena de amor a nuestro oficio, una mirada llena de frescura y libertad, de entusiasmo y compromiso a la que unir la expreriencia acumulada en estos años», apuntan desde Ur. En el equipo, fundadores, como José Tomé -actor y escenógrafo-, colaboradores en montajes anteriores como la bilbaina Ana Garay -vestuario- o incorporaciones como la de Sergio Otegui, uno de los protagonistas de la obra. A.E.