Rodado Rodríguez quiso pitar una pena máxima por un tímido agarrón de Gerardo de la camiseta de un rival en el minuto 95
Un penalti infame rompe la racha
Tras un mal primer tiempo, los blanquiazules mostraron su capacidad de reacción en el segundo tras la entrada de Gari y Díaz de Zerio
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
Rodado Rodríguez quiso sancionar la típica acción en la que un defensor agarra tímidamente la camiseta del rival para fijar su posición sin desequilibrarlo. Un lance que nunca se sanciona porque de lo contrario los partidos de fútbol terminarían con resultados de balonmano. Gerardo se equivocó al agarrar la camiseta porque no se debe hacer eso sobre el rival que tiene el balón porque corres el riesgo de que si acaba en el suelo se pite el penalti, pero esa acción no se puede sancionar con tal rigurosidad. No sólo perdió la Real un punto muy importante por esa decisión, también se rompió una racha de nueve partidos sin perder y, además, Gerardo causará baja ante el Alavés.
Fue una gran pena porque la Real fue capaz, como en los anteriores partidos, de enmendar en un buen segundo tiempo un mal primero y el punto era muy bueno por el desarrollo del partido y por los resultados de los demás rivales directos. De los seis mejor clasificados sólo el Málaga ganó. Además, ampliar la racha a diez partidos invicto era algo muy importante.
Pero una decisión arbitral muy rigurosa, también la falta del 2-1 lo fue, provocó que el estreno de Badiola como presidente se saldara con derrota. Fue un partido en el que a la Real le costó demasiado entrar en el partido. El Salamanca comenzó mucho mejor y así marcó en el minuto 1 y pudo ampliar su renta en un primer tiempo en el que fue superior y en el que la Real sólo inquietó en dos disparos de Aranburu y Xabi Prieto, que jugó en la izquierda de un 4-1-4-1, con Elustondo y el azpeitiarra por detrás de Delibasic.
Cambio importante
No funcionó el once, y Coleman acertó al dar entrada a Gari y Díaz de Zerio, que enseguida fabricaron el gol de la igualada, que rompía su racha de más de trece meses sin marcar. Jorge Alonso, la perla salmantina, marcó un gol en una falta muy bien sacada, pero su remate se quedó eclipsado por el gran derechazo de Mikel Aranburu.
La Real demostró su fortaleza de los últimos partidos para reaccionar a los goles rivales y su ambición para ir a buscar un triunfo que tuvo en sus botas Díaz de Zerio, que remató al centro de la portería cuando de enviar el balón a cualquier otro lado habría acabado en gol.
La búsqueda de la victoria deparó que el segundo tiempo fuera muy abierto, pero al final la Real daba el empate por bueno tras dos sustos dados por Isaac y Jorge Alonso. Fue entonces cuando llegó la jugada del penalti de Gerardo sin tiempo ya para la reacción.
Lo que deberá hacer la Real en los próximos partidos, en los que parece que Coleman seguirá en el banquillo tras la reunión de hoy, es no tener que reaccionar siempre.
El Salamanca volvió del parón mucho más enchufado y ya en el primer minuto marcó por mediación de Jorge Alonso, que luego logró el 2-1 en una falta directa pitada a Mikel González que también ofreció muchas dudas.
Gari Uranga y Mikel Aranburu, de gran disparo desde fuera del área, fueron capaces de igualar en una segunda parte en la que la Real fue mejor y buscó la victoria. Cuando daba por bueno el empate, llegó el mazazo final.
Chris Coleman no quiso hablar de la reunión que mantendrá hoy con Iñaki Badiola y Pako Aiestaran, aunque dio a entender que seguirá en la banquillo cuando señaló que «lo mejor es que ya ha pasado todo el ruido de las últimas semanas. Sabemos quién es el nuevo presidente y ahora espero que todos juntos nos concentremos en el próximo partido con el Alavés. Con Iñaki ya hablaremos, pero lo que más me importa es el próximo partido».
Sobre el de ayer dijo que «en la primera parte parecía que estábamos cansados, recibimos un gol nada más empezar y no hemos estado bien y en el descanso hemos realizado unos cambios y la respuesta ha sido muy buena, empatamos pronto y estuvimos mucho mejor, pero acabamos de la peor manera. No pensamos que ha sido penalti, habrá que verlo en la televisión. Destacaría la reacción de los jugadores de ambos equipos, todos estaban sorprendidos. Viendo las reacciones, pienso que no ha habido penalti. El árbitro lo justificó porque parece que Gerardo ha agarrado de la camiseta a un rival. Así pitaríamos penaltis constantemente».
Destacaba que «es la primera derrota en diez partidos. Estoy decepcionado y disgustado porque hace mucho que no perdíamos, pero no hagamos un drama de la derrota. El próximo fin de semana tenemos un derbi de mucho trabajo y necesitamos centrarnos otra vez para lograr un buen resultado».
En varias ocasiones, Coleman incidió en la importancia de centrarse en el juego y, a la hora de justificar el mal primer tiempo de su equipo, se refirió más en los factores que han rodeado al club que en los efectos de los días de descanso: «Hay que tener en cuenta que hemos tenido una semana de elecciones, con nuevo presidente, muchas especulaciones, preguntas de si habrá cambios o no... No es culpa de nadie, pero es una forma difícil de afrontar los partidos. Ahora sabiendo quiénes somos y dónde estamos, podemos trabajar juntos y encarar los partidos de una manera mejor. Esta vez hemos entrado con un ritmo muy lento. El Salamanca estuvo mucho más metido. En la segunda parte estuvimos más agresivos, hemos sido mejores, pero cuatro de las cinco derrotas las encajamos en los últimos minutos. Eso es difícil, pero no debemos hacer un drama de esto. Llevábamos una buena racha, hay que aceptarlo y volver a tener una racha como hasta ahora».
Del penalti, Gerardo dijo que «sólo lo ha visto él. Es un forcejeo dentro del área que incluso él se permite dar la vuelta y tirar y ante la sorpresa de todos ha pitado penalti».
GARA
