El agente Hubert Boniseur de la Bath es anterior a James Bond, pues su nacimiento literario de la mano del escritor Jean Bruce se remonta a 1949. El autor utilizó las siglas OSS de la Oficina de Servicio Estratégico, que fue la precursora de la CIA. El cine francés lo llevó a la pantalla a principios de los 60 con una película de André Hu-nnebelle, a la que seguirían hasta siete más. Cuatro décadas después vuelve a resucitarlo en una nueva aventura con un toque deliberadamente retro, porque se trata en sí mismo de un producto ligado a la estética kitsch. Se utiliza el tipo de color y de formato panorámico de la época, a la vez que el actor Jean Dujardin responde a un perfil paródico inspirado en los héroes de la época, los cuales solían tener un aspecto mucho más maduro que los actuales.