El PSOE se convierte en la primera fuerza en Bizkaia ante un importante batacazo jeltzale, que pierde su primacia en su feudo tradicional. Mientras, la abstención activa que reclamaba la izquierda abertzale obtiene unos resultados destacados en algunas localidades donde el independentismo siempre ha tenido su peso específico.

El partido de Iñigo Urkullu es el gran perdedor de la cita electoral con pérdida de votos y de un escaño, que corresponde con el acta de diputado de menos que tiene Bizkaia por razones demográficas, al pasar de 9 a 8. No fue una noche fácil para los burukides que vieron esfumarse algo más de 66.000 votos respecto a hace cuatro años y dejar de ser, y eso tiene su importancia entre la moral de la parroquia jelkide, la primacia donde ha sido su bastión en las últimas décadas. El descenso porcentual se sitúa en el 6%.

El PSOE alcanza los 228.094 sufragios y se convierte en la primera fuerza en Bilbo, al igual que en Abadiño, Abanto, Arrigorriaga, Barakaldo, Derio, Erandio, Ermua, Etxebarri, Galdakao, Iurreta, Leioa, Muskiz, Ortuella, Portugalete, Santurtzi, Trapagaran, Zaldibar y Zaratamo, algunas de ellas plazas jeltzales durante décadas.

Serán cuatro diputados los que sentará el PSOE en el Parlamento español, con un porcentaje del 24,74%, cerca de cinco puntos más respecto a cuando José Luis Rodríguez Zapatero llegó sorpresivamente a La Moncloa. Con algo más de 42.500 votos respecto a hace cuatro años, consiguen arrancar al final del recuento un acta al PP, que se queda con un único representante por Bizkaia por 400 votos.

Ezker Batua pierde la mitad de sus apoyos, arrastrados por el «tsunami bipartidista», pasando del 6,10 al 2,93% de representatividad. También bajan Eusko Alkartasuna y Aralar, dos fuerzas residuales en este herrialde que continúan perdiendo cada cita electoral el respaldo de los vizcainos, más en los comicios al Congreso español

La abstención se sitúa por encima del 8% respecto a hace cuatro años, llegando al 32,46%. En localidades vizcainas con fuerte implantación abertzale como Ajangiz, Amoroto, Arakaldo, Atxondo, Aulesti, Bermeo, Berriatua, Dima, Elorrio, Etxebarria, Forua, Gatika, Gizaburuaga, Izurtza, Lekeitio, Mallabia, Mañaria, Munitibar, Muxika, Nabarniz, Ondarroa y Ziortza-Bolibar fueron cientos los vecinos que siguiendo la consigna del independentismo optaron por no meter ninguna papeleta en las urnas, al igual que en otros grandes municipios.