Dimite el gobernador de Nueva York tras el escándalo de prostitución
GARA |
El gobernador de Nueva York, el demócrata Eliot Spitzer, presentó ayer su dimisión -que será efectiva a partir del lunes-, dos días después de que se descubriera que contrató los servicios de prostitutas de lujo durante su mandato y tras negociar esa salida con la Fiscalía General de ese estado de EEUU.
«Los remordimientos me acompañarán siempre», dijo Spitzer en su comparecencia de ayer ante los medios de comunicación en Nueva York, en la que afirmó que no le quedaba más remedio que «aplicarse a sí mismo» los mismos criterios de «rectitud» y de «asunción de responsabilidad» que siempre pidió a los demás en su carrera política.
Añadió que David Alexander Paterson, de 53 años y hasta ahora vicegobernador, que fue quien le pidió que dimitiera, asumirá el cargo de gobernador de Nueva York el 17 de febrero, lo que le convertirá en el primer afroamericano en llegar a ese puesto en el Estado y el cuarto en Estados Unidos.
Acompañado por su esposa Silda, con quien lleva 21 años casado, Spitzer, de 48 años y quien fuera fiscal general del Estado declaró que «sentía profundamente» lo ocurrido «por no haber estado a la altura de las circunstancias».
Spitzer, de 48 años y quien fuera fiscal general durante ocho años, acaba así una carrera política cimentada en la ética y la persecución de la corrupción y las irregularidades financieras, envuelto en un escándalo sexual que se destapó después de ser investigado por inspectores del Servicio de Rentas Internas (IRS), a raíz de la escucha de una conversación telefónica en la cual concertaba una cita con una prostituta en un hotel de Washington en febrero.
80.000 dólares
El escándalo trascendió a la opinión pública el pasado lunes, cuando el diario «The New York Times» reveló su presunta vinculación con una red de prostitución de lujo en Washington y en Nueva York, a la que el gobernador habría recurrido en varias ocasiones.
En las últimas horas se ha sabido que Spitzer se gastó 80.000 dólares (51.000 euros al cambio actual) durante los últimos diez años en pagar servicios de prostitutas y que abonaba 4.300 dólares (2.700 euros) cada vez que requería los servicios de una de las mujeres.
Los abogados de Spitzer han negociado durante dos días con la Fiscalía de Nueva York un acuerdo que pueda evitar su imputación o reducir su responsabilidad. Sin embargo, el fiscal federal de EEUU para el Distrito Meridional de Nueva York, Michael García, aclaró que finalmente no se llegó a ningún acuerdo.