La fuerte caída de votos padecida por el PNV en CAV y el incremento experimentado por el PSE ha llevado a determinados analistas a establecer una relación directa entre ambos fenómenos. Se da por hecho que el bajón de uno y la subida del otro son vasos comunicantes y, a partir de ahí, se establece el resultado previamente deseado: que el PNV se desangra por las veleidades soberanistas a las que le arrastra el lehendakari, por lo que debiera volver al redil de la trasversalidad.

La cuestión está en ver si los números, puestos en relación con una cierta lógica electoral, avalan realmente esos análisis. A la vista de que la mayoría de partidos ha sufrido pérdidas y el PSE es el único que ha subido, ¿cuáles han podido ser las corrientes de trasvase posibles? Es difícil pensar que quien en 2004 votó a EA o a Aralar haya votado en esta ocasión al PSE. Puede haber casos individuales, pero poco significativos. Es más lógico considerar que al PSE le han llegado apoyos de EB, del PP, del PNV y de sectores que en 2004 se abstuvieron y que tras el atentado mortal contra Isaías Carrasco decidieron acercarse en esta ocasión a las urnas.

En términos comparables, de noche electoral a noche electoral, el PSE ha subido en la CAV 88.609 votos. El PP ha perdido 25.875. ¿Dónde han podido ir la mayoría de esos votos? A ningún partido abertzale porque, de hecho, ninguno ha subido. EB ha perdido 51.601 votos. En total, las pérdidas de ambos suman 77.476. Es razonable que parte de los votos del PP sean esos 10.481 del partido de Rosa Díez (UPD) y que electores de EB hayan nutrido los 6.298 obtenidos por la candidatura Berdeak-Los Verdes. Aún así, lo más factible es que unos 60.000 de los 88.609 votos que ha crecido el PSE provengan de ex votantes del PP y de EB. Otro número indefinido habrá llegado de la abstención. Pero, incluso sin contar a estos, no serán más de 28.000 los votantes que han cambiado la papeleta del PNV por la del PSE.

¿Dónde están los otros 86.000 de los 113. 908 que ha caído el PNV? El grueso sólo puede estar en la abstención y entre los 28.219 electores que ha bajado el censo. ¿Por qué no han votado los abstencionistas? Quizá porque no ven a ese PNV radicalizado del que se habla. Quizá porque sólo encuentran el que sigue tratando de cautivar a España o a Zapatero con ofertas de pacto y lealtad. O quizá porque en Madrid no se les ha perdido nada.