El Comité Ejecutivo de la FIFA acordó el viernes mantener las limitaciones para la disputa de partidos en altitud según lo acordado en diciembre de 2007, pese a la defensa de la CONMEBOL -Confederación Sudamericana- para que la ciudad boliviana de La Paz sea sede de las eliminatorias de Sudáfrica 2010.

Estas limitaciones determinan que sólo se jugarán partidos internacionales a más de 2.750 metros de altitud tras un periodo de aclimatación de los participantes de una semana como mínimo y en el caso de una superior a 3.000 metros el tiempo de adaptación será de al menos dos semanas.

La FIFA recordó que adoptó la decisión de limitar los encuentros en altitud tras las conclusiones de un simposio médico celebrado en Zúrich.

Malestar en Bolivia

Pese a la ratificación del veto a la altitud, el presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró ayer que la selección de su país jugará en La Paz, a casi 3.600 metros, la próxima eliminatoria del Mundial de Sudáfrica 2010 ante Chile.

Morales, gran aficionado al fútbol, agregó que el viernes fue «un día de luto para el fútbol mundial» y pidió a los dirigentes de la FIFA que reflexionen porque está «demostrado médicamente» que practicar deporte en la altura no es perjudicial para la salud.

Países como Argentina, Ecuador o Perú han defendido la postura de mantener la capital boliviana como escenario de las eliminatorias sudamericanas.