ALICIA CACHERO MARTINEZ Portugalete
Tengo que estar contenta
Eso me decía la gente cuando fui seleccionada para trabajar en uno de los grandes comercios del MegaPark (ése que habrá amueblado muchas de vuestras casas). Pero no sé por qué, no consigo estarlo.
¿Será porque con mi salario (mucho más bajo que el de otros comercios en Bizkaia) no puedo acceder a una vivienda que amueblar?
¿Será porque me avisan una hora antes de que me tengo que quedar a hacer horas extras... O quizás porque no me las pagan?
¿Será porque como muchas de mis compañeras (casualidad, la mayoría somos mujeres) tengo que tener especial cuidado en no ponerme enferma, no vaya a ser que pierda mi «maravilloso» puesto de trabajo?
¿Será porque cuando oigo «Barakaldo va a más» sólo puedo pensar en más precariedad laboral y exclusión social?
No lo sé, quizás sólo sea porque yo soy un poco «rarita». Voy a esperar, pues «sueño» con ser dentro de unos años una de las tan mentadas mileuristas y, por fin, estar contenta.
Una futura trabajadora contenta.