El Ayuntamiento de Cintruénigo acogerá hoy la capilla ardiente de Carlos Chivite Cornago. El óbito del secretario general del PSN se confirmó a las 13.30 de ayer, horas después de que entrara en situación de muerte cerebral y cuando se cumplían justo 30 días de su ingreso en la UCI del Hospital de Nafarroa por una hemorragia cerebral.

La capilla ardiente instalada en la localidad del político fallecido permanecerá abierta al público entre las 11.00 y las 19.00. A las 20.00 se realizará el funeral, y después el féretro será llevado a Tutera para su incineración, «tal y como era su volun- tad» según indicó la secretaria general del PSN en funciones y presidenta del Parlamento, Elena Torres, que se encargó de comunicar el fallecimiento.

El fatal desenlace, aunque esperado debido al tiempo transcurrido desde la hemorragia cerebral del 1 de marzo y a la falta de evolución positiva, provocó consternación en el PSN y la clase política navarra en general. En las condolencias se volcaron especialmente, junto a su partido, UPN y el PP, así como las instituciones que controlan.

Agradecen la «estabilidad»

Así, el Ejecutivo navarro emitió una nota en la que da el pésame a su esposa, sus dos hijas, sus familiares, sus amigos y sus compañeros del PSOE. El Gobierno de Miguel Sanz destaca «la importante aportación al progreso de la Comunidad Foral y a su estabilidad institucional que Carlos Chivite ha realizado a lo largo de las últimas décadas». Se apostilla que Chivite ha actuado en esta línea en toda su carrera política, tanto en su trayectoria municipal en Cintruénigo como en la desarrollada en las Cortes españolas y también «en los distintos niveles de responsabilidad en el PSN-PSOE. Ha destacado siempre la actitud dialogante y positiva en servicio del bien común y de los intereses generales de Navarra y de España», añade la nota.

Por parte de UPN, su secretario general, Alberto Catalán, lamentó «profundamente» la noticia y dijo de Chivite que «ha sido un interlocutor necesario para el entendimiento, por lo que es justo el reconocimiento de la sociedad navarra». Y la alcaldesa de Iruñea, Yolanda Barcina, también de UPN, habló de «una persona responsable, que ha trabajando siempre buscando lo mejor para Navarra».

También el PP mostró pesar por la muerte. Se encargó de hacerlo su portavoz en el Senado, Pío García Escudero, para quien Chivite fue «un excelente compañero» en la Cámara Alta, caracterizado por «su valía tanto personal como política».

Desde su partido, la Ejecutiva Federal del PSOE emitió un comunicado en el que muestra su «inmensa gratitud» al que fuera secretario general del PSN desde 2004. «Su humanidad, ejemplo de lucha y sacrificio, lealtad, generosidad y compromiso con el proyecto socialista han sido, son y serán siempre un ejemplo», alaba la dirección del PSOE, que en las últimas semanas ha enviado al Hospital de Nafarroa a dirigentes como Diego López Garrido, Pedro Zerolo o Alfredo Pérez Rubalcaba.

En similares términos, alabando sobre todo la «generosidad» de Chivite, se expresaron otros compañeros de filas, como los del PSE.

Opciones abiertas

En sus últimas horas, Chivite recibió el respaldo de la cúpula del PSN. En el Hospital de Nafarroa estuvieron Elena Torres, que ha tomado el relevo de modo provisional; Román Felones, presidente del PSN; Roberto Jiménez, portavoz en el Parlamento; o Javier Sanz Carramiñana, que será su sustituto en el Senado. Chivite había revalidado su escaño el pasado 9-M, cuando estaba ya en la UCI.

Pasado el duelo, el PSN deberá afrontar la renovación de la dirección. Por razones obvias de respeto, el debate ha estado silenciado en las últimas semanas, por lo que todas las incógnitas están abiertas. De hecho, antes de que le sobreviniera la hemorragia cerebral Chivite no había confirmado si pensaba concurrir a la reelección. En los últimos meses había desarrollado una ingente labor para cerrar la crisis interna desatada por la decisión del PSOE de renunciar a un gobierno alternativo con Nafarroa Bai e IUN. Entre otras cosas, había vetado la realización de un congreso extraordinario, exigida inicialmente por los críticos con la decisión.

En esta labor, el fallecido secretario general logró por ejemplo que Juan José Lizarbe, su predecesor en el cargo, diera un paso atrás y renunciara a liderar un sector crítico, al menos hasta el congreso ordinario previsto para julio. Otras opciones a tener en cuenta serían las del anterior cabeza de lista del PSN, Fernando Puras, figura que no se «quemó» en la crisis de agosto al dimitir tras la decisión de Ferraz, y las más continuistas de Elena Torres o del secretario de Organización y virtual número 2 del partido, Samuel Caro.