Ingresos inexplicados de casi un millón de euros fuerzan a Ahern a dimitir
Hace poco más de un año, el primer ministro irlandés, Bertie Ahern, prometió antes de las elecciones irlandesas que aclararía todos sus asuntos financieros relativos a donaciones personales ante un tribunal investigador. Ayer, la falta de claridad le llevó a anunciar su dimisión como primer ministro el próximo mes de mayo, en un momento en el que tribunal ya cuestiona el origen de casi un millón de euros del que Ahern afirma no recordar la procedencia.
Soledad GALIANA |
El primer ministro irlandés, Bertie Ahern, mostró su habilidad negociadora durante el proceso de paz irlandés, pero su incapacidad para hacer frente a las sospechas sobre las donaciones personales que recibió durante su etapa como ministro de Finanzas y durante su campaña para presidir su partido le han costado el liderazgo del Gobierno de Dublín. El primer ministro abandonará su cargo el próximo 6 de mayo, precisamente un día antes de que lo haga el actual primer ministro norirlandés, Ian Paisley, que dejará de estar al frente de la Administración de Belfast el 7 de mayo.
La investigación del juez Mahon sobre algunas denuncias de corrupción de funcionarios públicos ha desenterrado pruebas y sospechas de tráfico de influencias y corrupción en las administraciones locales y nacionales irlandesas y ha cavado la tumba de la carrera política de Ahern, que ha sido primer ministro y líder del partido conservador Fianna Fáil durante los últimos once años.
Ahern se ha visto obligado a declarar ante el tribunal en tres ocasiones, y la investigación de sus finanzas entre 1988 y 1997, ha dejado al descubierto lo que él ha descrito como «donaciones personales», que alcanzan un total de casi novecientos mil euros. Las declaraciones de la semana pasada de su secretaria personal, Gráinne Carruth, reconociendo haber cometido perjurio en su testimonio inicial ante el tribunal de investigación ha sido el detonante que ha hecho explotar la creciente presión que en las filas de su partido exigía su dimisión. Carruth admitió haber ingresado dinero en la cuenta de Ahern y que estos ingresos podrían haber sido realizados en libras esterlinas.
Ahern aseguró que eran parte de su salario ministerial, pero ello no explica que el pago fuera realizado en moneda británica y no irlandesa. El Tribunal investiga si estos pagos podrían haber sido realizados por el constructor Owen O'Callaghan, una acusación realizada por otro constructor, Tom Gilmartin, que ha sido negada por O'Callaghan y Ahern.
El premier irlandés convocó una rueda de prensa en la mañana de ayer y, ante los medios y rodeado por varios ministros de su Gabinete anunció su decisión, explicando que se debía a que «el aluvión constante de comentarios» en relación a sus finanzas dificultaba la labor de Gobierno, y afirmó que había sido «motivada exclusivamente por lo que es mejor para el pueblo» y que era «sólo una decisión personal inspirada por el deseo de reenfocar la agenda política». Ahern aseguró en su discurso ante los medios que estaba orgulloso de su papel en el proceso de paz irlandés.
Su anuncio se produjo horas antes de un esperado debate en el Dáil -parlamento irlandés-, en el que el primer ministro iba a enfrentarse a las preguntas de los partidos de la oposición sobre la declaraciones de Carruth ante el tribunal y el origen de esos ingresos.
La dimisión del primer ministro irlandés, Bertie Ahern, se hará efectiva el próximo 6 de mayo, un día antes de que el unionista Ian Paisley deje su cargo al frente del Gobierno norirlandés.
La secretaria personal de Ahern, que reconoció haber cometido perjurio, dijo haber ingresado dinero en la cuenta del primer ministro y que esos ingresos podrían haber sido realizados en libras esterlinas.