Juan José Muguruza, director ejecutivo de La Caixa de la zona Norte, y Ana Guzmán, delegada general en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, expusieron que 2007 «fue un muy buen año» para la entidad catalana, que se asienta desde hace ya 25 años en suelo vasco. Muguruza dijo que «La Caixa es un referente de la economía vasca».

El año pasado creció en un 18,5% el volumen de negocio hasta los 11.105 millones de euros y, como explicó Muguruza, se mantienen «intactos» los objetivos del plan estratégico que culmina en 2010. Según el mismo, dentro de tres años La Caixa habrá captado un negocio total en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa de 17.500 millones. Para este año, las previsiones que maneja el equipo ejecutivo de La Caixa indican un volumen de negocio de 12.900 millones de euros, lo que supondría un aumento del 16,16% respecto a la actividad del año pasado.

El máximo ejecutivo de La Caixa en suelo vasco advirtió que para lograr dar ese paso se ha «reorientado la estrategia» debido a la reducción de la demanda de los créditos hipotecarios. En 2007, la actividad hipotecaria en la CAV aumentó un 15%, según los datos del cierre que se aportaron ayer. Muguruza reconoció que en la actualidad «somos más selectivos en el crédito inmobiliario, pero mantenemos las promociones que iniciamos. Creemos que hay suficiente actividad en marcha para mantenernos». No obstante, el director ejecutivo de La Caixa en la zona Norte explicó que «no se van a mantener los ritmos de crecimiento en los créditos hipotecarios, por lo que nuestra estrategia se concentra en este momento en impulsar los créditos hacia el mundo de las empresas y a los autónomos». Para ello, recordó que utilizan dos herramientas «fundamentales» de la Caixa: «la solvencia y la liquidez».

Juan José Muguruza reconoció, no obstante, ante la desaceleración económica que la CAV se encuentra «en mejor posición económica» que el resto del estado español y ahondó en este tema al señalar que «la burbuja inmobiliaria e hipotecaria no se ha producido» dentro del territorio vasco. Esta mejora competitiva permite a La Caixa afianzar sus pretensiones de crecimiento para los próximo años que «van hacia la especialización, la innovación y la internacionalización». En este caso, recordó que «tenemos que acompañar a nuestras empresas fuera. Estamos preparados para dar ese impulso a la actividad en los mercados emergentes».

En 2007, la caja catalana concedió 6.645 millones en créditos, lo que supuso un incremento total del 18,3% «y donde destaca la financiación a empresas», precisó Ana Guzmán, que se encargó de los detalles económicos más precios. Según dijo, el 69,5% de la inversión de la Caixa tiene garantía hipotecaria. «El ratio de morosidad del ejercicio se ha situado en el 0,34%, una de las cifras más bajas del sector financiero», precisó la delegada general de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Los recursos de clientes ascendieron a 4.460 millones.