Madrazo ve en el PNV «un intento de que Ibarretxe no sea candidato»
En un momento en que el tripartito ha sido puesto en cuestión de forma expresa desde el PNV, uno de los afectados por los movimientos en el seno de la formación jeltzale, el coordinador general de Ezker Batua, Javier Madrazo, advierte en estas maniobras un intento de conseguir que Juan José Ibarretxe no encabece las listas en las próximas elecciones autonómicas. El consejero de Vivienda y Asuntos Sociales mira a Bizkaia para situar las responsabilidades.
I.B. |
Tras una semana marcada por las declaraciones del diputado general de Bizkaia, el jeltzale José Luis Bilbao, dando por «caducada» la fórmula del tripartito para el Ejecutivo de Lakua, y la posterior intervención del presidente del PNV, Iñigo Urkullu, con explícitos reproches a sus socios de gobierno y confirmando que Bilbao no iba por su cuenta, uno de los interpelados, el consejero de Vivienda y líder de EB, Javier Madrazo, salió ayer al escenario advirtiendo en el seno del PNV «un intento de que Ibarretxe no sea candidato» en las próximas elecciones.
En una entrevista publicada en «El País», Madrazo, que asiste asimismo a movimientos internos en EB que ponen en cuestión la política de alianzas de la coalición tras dos legislaturas seguidas en el gobierno autonómico, asegura creer en el modelo de gobierno tripartito porque «no veo que sea posible otro mejor», salvo que «se quiera un gobierno de pura gestión, como en el pasado los del PNV con el PSE, dejando aparcadas la pacificación y la normalización».
Operación de alcance
Después de valorar que Ibarretxe está muy consolidado «en las bases de su partido», el consejero autonómico considera que tras las últimas declaraciones de los burukides del PNV hay «una operación de más alcance». «Este ataque al tripartito es un ataque al lehendakari, que tendrá que ver con sus pugnas internas en el PNV y con el intento de que Ibarretxe no sea su próximo candidato a lehendakari», declara a este respecto.
Preguntado sobre si percibe que en la formación jeltzale tienen ya decidido que Ibarretxe no sea su próximo candidato para gobernar en Ajuria-Enea, Madrazo no considera que esté todo dicho a este respecto, pero sí que insiste en que la declaración de Bilbao «no ha sido improvisada». «Cuando se hace, se sabe que se le ataca también a él, y cuando se hace eso supongo que es que hay interés en que no sea el referente del PNV en las próximas elecciones», apunta el coordinador general de EB, quien mira al sector vizcaino de la formación jeltzale para buscar a los responsables de estos movimientos.
Lo cierto es que, además del visto bueno de Urkullu, las declaraciones efectuadas por José Luis Bilbao, que siguen la línea marcada por el anterior presidente del PNV, Josu Jon Imaz -y el propio Urkullu, a pesar de la ponencia política consensuada con el sector de Joseba Egibar en las últimas elecciones internas- han recabado el apoyo expreso de otras personalidades de peso de su partido, como el alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna, declarado partidario del pacto con el PSE.
Una toma de posición ante la que Ibarretxe apenas ha hecho ninguna valoración, al contrario que otros consejeros como Joseba Azkarraga (EA) y el propio Madrazo.
El coordinador general de EB dice no haberse sorprendido por las declaraciones de José Luis Bilbao porque el diputado general de Bizkaia «nunca ha sido un valedor del tripartito».
Los movimientos internos en el PNV son observados con interés en el seno del PSOE y también en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que demora su cita con el lehendakari a la espera de ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Zapatero no tiene especial prisa en reunirse con el mandatario autonómico tras proclamarse ganador en las elecciones del 9 de marzo, y se mantiene a la espectativa, aun cuando el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, advirtiera de un posible «choque de trenes» en su última comparecencia en Madrid.
En el seno del PSOE no dan imporancia a estas declaraciones del líder jeltzale, más aún cuando el propio Urkullu ha avalado la postura de quienes dentro de su partido apuestan por dar por cerrada la etapa del tripartito y miran al PSOE como futuro socio.
Desde esta formación se ha trasladado al PNV que serían receptivos a un posible acuerdo, siempre que el lehendakari aparque su «hoja de ruta».
Para Ibarretxe, prácticamente desaparecido en las últimas semanas, la reunión con Zapatero es sin embargo importante, ya que el primer paso de su plan contempla un pacto con el Gobierno español que debería ser ratificado por la ciudadanía de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Con acuerdo o sin él, deberá presentarse en junio ante el Pleno del Parlamento.