«Queríamos celebrar estos 30 años de andadura, 30 años en los que la izquierda abertzale ha sido el faro para todos los independentistas, referencia para todos los soberanistas y para la izquierda en Euskal Herria. Ese faro lo quieren apagar, pero que lo sepan, que lo tengan muy claro, ese faro seguirá alumbrando y nos irá dirigiendo para que el barco llegue a buen puerto, para que este pueblo consiga que sean respetados sus derechos y abramos la puerta a la posibilidad de la independencia», declaró Tasio Erkizia, antes de remarcar que el sábado «quedó en evidencia que no hay fuerza policial ni imposición para acallar la voz de la izquierda abertzale».

Erkizia compareció ante los medios acompañado de Txomin Ziluaga, Itziar Lopategi, Iñaki Olalde, Ainhoa Etxaide, Izaskun Larreategi, Julen Aginako e Itziar Aizpurua, que también tomó la palabra ante los medios.

Antes de nada, Erkizia indicó que el sábado fue un día lleno de imágenes: se homenajeó a Cándido Saseta, comandante de los gudaris, y se conmemoró el 71º aniversario del bombardeo de Gernika. Recordó que los fascistas arrasaron la localidad vizcaina con un objetivo muy claro: «Hacer desaparecer lo que era en aquel momento el símbolo de una identidad diferenciada, de Euskal Herria». Y señaló que en Durango, «una vez más, nos vimos frente a frente dos Euskal Herrias». Por un lado, «la Euskal Herria de la claudicación, de la sumisión, defendido todo ello por la Policía, la fuerza militar»; por otro, «un pueblo que quiere vivir, seguir siendo él mismo, y que a pesar de todas las represiones tiene voluntad firme de conseguir su libertad y sus aspiraciones democráticas».

Dijo tener la impresión de que el PNV «siempre que intenta ocultar ante el pueblo la claudicación y la traición recurre a lo mismo». Así, en 1978, «justo en un momento en que era posible un cambio importante, cuando murió Francisco Franco y todavía la Constitución española no había cerrado las posibilidades, el PNV, para intentar ocultar su claudicación, su cobardía, se manifestó contra la izquierda abertzale, arremetió contra la izquierda abertzale».

Los representantes independentistas consideran que el sábado la formación jeltzale hizo lo mismo y se preguntan por qué tiene el PNV tanto miedo a sus ideas y planteamientos políticos. «¿Acaso porque sabe que está traicionando a las aspiraciones legítimas de este pueblo por unos puestos políticos? ¿Porque prefiere defender sus intereses partidistas, sus intereses personales claudicando y haciendo dejación de los derechos legítimos de este pueblo?».

En Durango, llegaron a una clara conclusión: «Ni el PSOE ni el PNV conseguirán acallar la voz de la izquierda abertzale, por mucha cárcel, por muchos Garzones y jueces y por mucha Ertzaintza que utilicen. Tenemos determinación y no conseguirán acallar nuestra voz».

«Sólo hay dos caminos»

Uno de los mensajes que quisieron transmitir en la celebración del 30 aniversario de HB fue que «no hay caminos intermedios, que en Euskal Herria hay dos caminos políticos».

Uno de ellos, es «el camino liderado por el PSOE, que siguen el PNV y Nafarroa Bai, en un intento de asimilar Euskal Herria a España, de negar los derechos democráticos mínimos». Erkizia apuntó a este respecto que «ese proceso de la imposición, de poner el bozal a la izquierda abertzale y a todos los abertzales coherentes ha fracasado».

La otra vía es «la defensa del derecho a la autodeterminación, del derecho a ser un pueblo, a ser Zazpiak Bat». Los ayer portavoces independentistas opinan que seguimos teniendo «una oportunidad inmejorable para superar este conflicto político» y recordaron que para ello han puesto encima de la mesa «una propuesta posible, factible y democrática», con exigencia de igualdad de oportunidades para todos los proyectos políticos, una propuesta que conllevaría la superación del enfrentamiento, que se fundamenta en que Euskal Herria es una comunidad política con derechos culturales, lingüísticos, políticos, económicos...

En este sentido, invitaron a la sociedad a seguir firme en la defensa del derecho de autodeterminación y pidieron a los partidos que están en el Gobierno de Lakua y dicen no estar de acuerdo con estas actuaciones de la Ertzaintza que se revelen, que digan que no están dispuestos a que se persigan ideas políticas.