Kukutza gaztetxea cumple diez años en los que los y las vecinas de Errekalde hemos vivido momentos bonitos y momentos durísimos, hemos tenido las puertas abiertas para parrandas inolvidables y también para trabajar, para debatir, para conocernos y para aprender. También hemos vivido momentos amargos, irrupciones policiales que se han llevado a lo mejor del barrio con el único objetivo de reprimir y atemorizar. Pues ya veis, Hamar urte eta aurrera!

En los tiempos que corren, en los que el compromiso y el trabajo militante no están precisamente de moda, las paredes de Kukutza tienen el privilegio de ver pasar día tras día toda esa savia nueva que con su trabajo mantiene en funcionamiento más que un simple local, un lugar que compagina compromiso y ocio entre otras muchas cosas, un local donde podemos tomar un birra tranquilamente, leer un libro, practicar escalada, acudir a una charla o a un cursillo, o comer un menú vegetariano.

Yo, como vecino de Errekalde, el 19 de mayo iré a celebrar el décimo aniversario de este proyecto con el resto de los gaztetxes de Euskal Herria y de donde haya gente dispuesta a disfrutar de su ocio y de su vida de una forma solidaria y no capitalista y egoísta.

No quiero despedirme sin mandar un abrazo a todas y todos los que faltan en el barrio. Toba y Bittor, que por su compromiso militante tuvieron que dejar el barrio hace ya muchos años y no han podido conocer Kukutza, y a Uni, Naiara y Piol, que tantas horas de trabajo y buenos momentos han pasado construyendo este proyecto... ¡esperamos veros pronto en Kukutza!

Ánimo Kukutza!