La Policía española arresta a Etxegarai en aplicación de la cadena perpetua
Fernando Etxegarai ha vuelto a ingresar en prisión, pese a tener íntegramente cumplida su condena de 20 años y 9 meses. Fue apresado por la Policía española en aplicación de la doctrina 197/2006 del Tribunal Supremo, lo que en la práctica supone la imposición de la cadena perpetua. El arresto se produjo en Plentzia, donde residía desde que recobrara su libertad, hace cuatro meses y fue trasladado a prisión, donde deberá permanecer cuatro años más.
Oihana LLORENTE |
Fernando Etxegarai volvió a ser encarcelado ayer, en aplicación de la sentencia 197/2006 del Tribunal Supremo español, lo que en la práctica supone la aplicación de la cadena perpetua.
Etxegarai fue detenido por la Policía española en su domicilio, en Plentzia, donde residía después de quedar en libertad el pasado enero tras cumplir, de manera íntegra, su condena; es decir, 20 años y 9 meses de cárcel. Sin embargo, en un hecho insólito y sin precedentes, sobre Etxegarai pesaba una orden de búsqueda y captura dictada por la Audiencia Nacional, ya que una vez puesto en libertad, el tribunal especial decretó el aumento de su condena en cuatro años más.
La libertad que el ex preso Fernando Etxegarai poseía desde enero quedó truncada ayer cuando agentes de la Policía irrupieron en su domicilio y lo llevaron preso.
El operativo policial fue dirigido y coordinado por el juzgado de Bilbo, al que fue trasladado Etxegarai nada más ser apresado. Las agencias de noticias indicaron ayer que el vecino de Plentzia sería trasladado directamente a la cárcel, sin necesidad de que comparezca en la Audiencia Nacional española. En cualquier caso, detallaron que el tribunal especial será informado del ingreso en prisión por el juzgado vizcaíno.
El tribunal, de vacaciones
Etxegarai quedó en libertad a principios del mes de enero. En concreto, el día 4 de ese mes, la pareja de Etxegarai pidió la aplicación del Habeas Corpus con carácter de urgencia y sus abogados reclamaron su puesta en libertad a la Audiencia Nacional por tener cumplida de manera integra la condena impuesta. En los escritos presentados advertían a los jueces de que se podría incurrir en un delito de «detención ilegal» en caso de no ser aceptadas sus peticiones.
El mismo día, según detalló la letrada de Etxegarai a GARA, la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional emitió un auto judicial en el que se procedía, en palabras textuales, a «acordar la puesta en libertad» de Etxegarai «por cumplimiento de la condena impuesta». La decisión fue adoptada por los jueces Alfonso Guevara, Nicolás Poveda y Julio de Diego López.
En diciembre de 2007, sin embargo, la Fiscalía reclamó al centro penitenciario de A Lama, donde se encontraba Etxegarai, y a la Audiencia Nacional, que aplicaran la doctrina impuesta a partir de febrero de 2006 para impedir a los presos políticos vascos rebajar las penas con redenciones, tal y como se recoge en el Código Penal de 1973. No obstante, ni la prisión ni el tribunal especial respondieron a su petición.
Dos meses más tarde de que el vecino de Plentzia recobrará su libertad, en marzo, el tribunal especial dictó un fallo en el que se decretaba la «detención e ingreso en prisión» del represaliado de Plentzia. La justificación que esgrimieron los jueces que firmaron el último auto -Javier Gómez Bermúdez, Manuela Fernández Prado y Ramón Sáenz Valcárcel- era que la libertad de Etxegarai se acordó «por el tribunal de turno durante las vacaciones».
Asimismo, fijaron como límite máximo de cumplimiento, 25 años de prisión, conforme al Código Penal de 1995.
Este procedimiento dio como resultado un hecho insólito, ya que es la primera vez que la Audiencia Nacional decreta el aumento de la pena a una persona que se encontraba en libertad y con la condena cumplida.
En una entrevista concedida a GARA, una vez recobrada su libertad, Etxegarai indicó que ya había interpuesto un recurso ante el fallo de la Audiencia Nacional, aunque se mostró «escéptico» ante el resultado, ya que según explicó, lo resolverán los mismo jueces que decretaron el fallo en su contra. Asimismo, aseguró que tras esta instancia, apelará al Tribunal Supremo español.
En la entrevista que ofreció nada más cursarse la orden de búsqueda y captura, reconoció que «le atemorizaba» volver a prisión. Explicó que conoce «muy bien lo que supone la cárcel y sus condiciones de vida» y aunque precisó que considera «tener la cabeza bien amueblada», afirmó que «siente miedo al pensar si será capaz de aguantar cuatro años más».
Etxegarai desgranó ante este diario sus 20 años de estancia en prisión, y no dudó a la hora de considerar que la doctrina del Tribunal Supremo, impuesta ya a cerca de una treintena de presos políticos vascos, es «otra forma de matar».
Askatasuna pide compromisos
Askatasuna hizo público su enfado ante este arresto, y denunció que la represión del Estado español «no tiene límite». El organismo antirrepresivo calificó de «enorme Guantánamo» la política penitenciaria de Madrid y París, en la que situaron la cadena perpetua o la situación que viven los presos enfermos. Desde Askatasuna, encendieron «todas la alarmas» al entender que la situación es «muy grave» e instaron a la sociedad y a agentes e instituciones, a afrontar compromisos «firmes».
115 vecinos de Etxegarai realizaron en la tarde de ayer una encartelada en Plentzia para protestar contra este arresto. En el barrio bilbaino de Indautxu fueron 60 las personas que se manifestaron en apoyo a Etxegarai.