Maite SOROA
Ahora, el turno de Ussia
Cuando al odio visceral se le suman la mala fe y la ignorancia supina, terminan por aparecer escritos como el que ayer mismo firmaba Ildefonso Ussía (se empeña en ocultar un nombre de panoli) en «La Razón». Una vez más volvía a la carga contra el euskara con tono pretendidamente irónico y, claro, hacía el ridículo.
Según Ussía «En la Sanidad vasca, puntúa más saber vascuence que ser doctor en Medicina. Y con gran diferencia. El doctorado apenas vale cuatro puntos, en tanto que el conocimiento fluido del vascuence alcanza los dieciséis, e incluso veinticuatro en determinadas plazas. Los idiomas francés e inglés no tienen tanta importancia. Son lenguas menores, de escasa utilidad. Apenas un punto y medio. Esos idiomas que no sirven para nada, el español, el francés, el inglés y el alemán, no abren las puertas de la Sanidad pública vasca». Empieza faltando a la verdad y se encamina al despropósito.
Para seguir avanzando en la senda del estrambote dice Ussia que «lo que no establece la `Osakidetza' son los puntos que vale saber cantar `zortzikos' para acompañar con más dulzura el tránsito de los pacientes abertzales. Porque si tener el doctorado en Medicina sólo se valora en cuatro puntos, los tránsitos van a ser excesivamente frecuentes. Y los `zortzikos' de despedida tienen que valer, por lo menos, ocho puntos. Por ejemplo, una buena interpretación de «Guitarra zartzo bat da» no puede bajar de los quince puntos, porque es un `zortziko' complicado, con agudos y bajos que pueden acabar con la garganta de cualquiera. En cambio, la nana «Aurtxoa Seaskan», muy suave y bella, apropiadísima para un agonizante que haya ingresado en un hospital con un pequeño grano en el culo, no merece más de cinco puntos, uno más que ser doctor en Medicina».
Dice muchas más melonadas, pero me quedo con el último párrafo: «Como última voluntad, por si me torciera un tobillo en mi próxima visita a Vasconia y fallezco en un hospital, deseo que mi agonía sea acompañada por una buena interpretación del «Ator, ator, mutil», que me gusta mucho». Seguro que habría coro para cantárselo.