La lluvia ya ha obligado a anular una treintena de choques en París
GARA | PARÍS
Una treintena de partidos individuales ya han sido anulados por la organización del torneo de tenis de Roland Garros debido a la persistente lluvia que cae sobre París.
Sin embargo, pese a que la lluvia esté impidiendo que se juegue al tenis, la actividad del club de tenis de París no para. Y es que los encordadores de raquetas siguen con su ferviente ritmo de trabajo.
Luis Pianelli es un argentino de 40 años que, por segunda edición, acude a Roland Garros a poner cuerdas de raquetas, a afinar la herramienta de los tenistas. Abogado de profesión y loco por el tenis, Pianelli viene a París cada año desde 1997 a dar rienda suelta a su pasión por el tenis, pero en dos ocasiones lo ha hecho para practicar su segundo oficio, el de encordador.
«Mis amigos me dicen de broma que soy un encordador que en mis ratos libres hago de abogado», afirmó ayer el técnico que no detiene su frenética actividad que le ocupa toda la jornada.
Pianelli sabe que ejerce una profesión «de precisión» en la que «no se permiten errores» y en la que lo más hermoso es el reconocimiento del tenista. «Tenemos mucha presión, es un oficio muy sofisticado», añadió.