«Esa mujer con la boca abierta...». La imagen de la mujer que grita en el «Guernica» de Picasso persigue a Enrique Morente (Albaicín de Granada, 1943) desde que vio los bocetos del cuadro expuestos en Madrid. Para él, esa figura es «la del genocidio», la de «las abuelas que quedan tras los destrozos de la guerra». La fascinación por el cuadro llevó al cantaor malagueño a indagar en Picasso y fue así que se topó con sus escritos. Años después ve la luz el disco «Pablo de Málaga», que saldrá la semana que viene a la venta con música de Morente y textos del pintor.

La presentación mundial del trabajo tendrá lugar en el Frontón Jai-Alai de Gernika el próximo 14 de junio, en un concierto gratuito patrocinado por la BBK. Enrique Morente viajó ayer a Bilbo para explicar los detalles a la prensa, en una comida a la que asistió también el alcalde de Gernika, quien aprovechó para pedir el traslado del cuadro a la villa vizcaina, «tal y como lo hubiera querido Picasso». «Siento una emoción muy fuerte por presentar este trabajo en Gernika», dijo Morente en la capital vizcaina. Para el músico granadino, este disco tiene algo de recuperación de la memoria histórica. «A mí me gusta el arte cuando es oportuno, no me gusta el arte oportunista. Este proyecto tiene su origen en la inauguración del Museo Picasso de Málaga, pero estaba sin terminar. Había que acabarlo porque tenía una deuda con el `Guernica' desde que vi los bocetos. La emoción que me produjo esa mujer con la boca abierta tenía que dar sus frutos. Cuando la vi, me imaginé a las abuelas de Irak, por eso una de las canciones la titulo `Guern-Irak. La hora escrita', ya que para mí habla de los genocidios que comete el ser humano».

«Pablo de Málaga» contiene trece temas -«un número que me trae buena suerte»- sobre los textos que Picasso escribió movido por el horror y la desolación de la guerra, pero también sobre los recuerdos de su Málaga natal, el olor a puchero, el sabor de casa, los juegos de infancia. «He creado la música pensando en la pintura -señala el cantaor-. La pintura es poesía y la poesía es pintura. ¿Cómo plasmar en el cante jondo el sonido de la pintura? Yo lo he querido imaginar, no sé si lo he conseguido». En este disco, que llega tres años después del último «Morente sueña la Alhambra», abundan las colaboraciones, entre ellas las de sus hijos Estrella, José y Soleá, la única que no es cantante profesional, sino filóloga, aunque, según su padre, «canta mejor que yo». Además, Niño Josele, Pepe Habichuela, David Cerreduela y otros primeros espadas del flamenco acompañan a Morente en esta aventura.

Con este trabajo, el músico andaluz da otra vuelta de tuerca a su carrera de treinta años, en la que ha buscado la renovación del género sin renunciar a las raíces del cante jondo. Inquieto y comprometido, Morente se ha convertido en el cantaor de referencia del último medio siglo.