A tres años de una nueva década, se intuye por la tendencia actual que ésta contará con una nueva línea de grupos más ágiles y permeables a las influencias de cada momento. Aunque lo parezca, a primera vista no cabe hablar de falta de personalidad, sino de capacidad para asimilar las corrientes del momento. Con presteza cabe la posibilidad de que las bandas no adopten una tendencia musical cuando esta se encuentra ya en desuso o agotada en su expresividad.

Falta inmediatez en nuestra escena, capacidad para adaptarse con diligencia, lo que requiere reflejos, calidad y moldeabilidad. No hablamos de lo peor de las modas, sino de lo mejor de las nuevas propuestas sonoras o, incluso, de las mejores renovaciones de los clásicos. En este sentido, Dynamo ha adoptado con diligencia una sonoridad actual, que, aunque remita en ocasiones a formaciones como Smashing Pumpkins, en conjunto viene marcada por la sonoridad pop y rock de la presente década, lo que les sitúa entre las formaciones vascas menos previsibles. Un trabajo que, en todo caso, han iniciado recientemente y al que aún deben colorear con mayor personalidad; no obstante, cabe la esperanza, pues entre su juventud trasluce convicción, chispa en las composiciones, interpretación y personalidad. Además de un contagioso optimismo acerca de sus nuevas canciones.

Con su demo debut ganaron el concurso de Euskadi Gaztea de 2007 y consiguieron muy buenas críticas en la mayoría de medios especializados. También alcanzaron el tercer premio en el festival Heineken Greenspace. Ahora, con la urgente experiencia acumulada, la adherida tocando en espacios tan comprometidos como Valencia o los bilbainos Kafe Antzokia y Bilborock, la banda se dirigirá en breve a Barcelona para la grabación de su primer álbum, que será producido por Jordi Mora (Bunbury, Standstil...), por lo que cabe imaginar que, mediante la buena dirección de Jordi y el entusiasmo y ganas de la propia banda, se consiga una primera referencia notable. En especial por la fe que tiene el grupo en sus nuevas canciones y por el entusiasmo con el que las describen. «Todo fue muy rápido desde nuestros primeros días, los temas salían bastante fluidos y no queríamos demorar demasiado la grabación. Vimos como grupos de nuestro alrededor ( Olimpic, Midnight Road, The Yellow Big Machine..) grababan sus primeras maquetas y empezaban a obtener sus frutos, y nos estimuló mucho a nosotros. Creíamos al cien por cien en nuestras canciones y sabíamos que no íbamos a hacer una maqueta mala. No sé si seis meses fue algo precipitado, ya que tras la maqueta hicimos canciones mejores, pero el resultado ha sido bueno. Igual sí somos algo ansiosos, quizá sea la edad, la inquietud musical o simplemente que teníamos muchas ganas de escuchar nuestras canciones (las tenemos aún mejores) en el coche y enseñarles a nuestros padres la razón por la que llevábamos meses sin pasar por casa para cenar», precisa un joven, pero despierto, Paco Regalado.

Dynamo está formado por Javier Hernández, bajista de 22 años y estudiante de Diseño Gráfico; Antonio Garamendi, guitarra de 21 años y estudiante de Derecho, que toca además el piano y se encarga de la voz, donde muestra un dominio y estilo por encima de la media; Kike Isasi es el batería, estudia Empresariales y tiene 19 años. El cuarteto se cierra con Paco Regalado, estudiante de Ingeniería Industrial de 23 años, guitarra solista. «No buscamos nada en especial -explica Paco-. El éxito es relativo, depende hacia donde apuntes. Ya hemos conseguido lo que nos habíamos propuesto en un principio. Con la cabeza serena, ahora llegan nuevas metas, otros horizontes»