Askatasuna informó ayer de que los presos políticos vascos Oier González y Juan Carlos Subijana han iniciado una huelga de hambre para conseguir que sean respetados unas peticiones concretas. Según explicó el organismo antirrepresivo, los dos represaliados llevaban varios días negándose a comer y el pasado 19 de mayo decidieron dar comienzo al ayuno.

González y Subijana reclaman a las autoridades de la prisión de Muret Seysses que sean respetados distintos derechos como que los presos vascos no estén aislados en dicha cárcel, poder recibir más visitas dobles, ser examinados por un médico y que al mes puedan recibir cuatro libros y dos CDs. Asimismo, reivindican que sus familiares tengan una tarjeta para pedir visitas, que los cambios de celda se den como mucho cada tres meses y que se normalicen sus comunicaciones internas y por carta. En solidaridad con González, 40 vecinos de Durango realizaron ayer una concentración en su localidad natal.

Por otro lado, el organismo antirrepresivo dio a conocer que Hodei Ijurko se encuentra en situación de aislamiento en la prisión de Curtis junto con cinco presos sociales.

Según indicó en un comunicado de prensa, la clasificación le fue notificada al joven navarro el pasado 8 de mayo tras la paliza sufrida a manos de funcionarios de la cárcel madrileña de Soto del Real. Se le mantendrá en primer grado, sin poder pasar a módulo, hasta dentro de tres meses.

En la prisión de Foncalant, por su parte, a Miriam Campos le han sancionado con restricción de comunicaciones durante las próximas siete semanas por haber realizado una huelga de hambre hace dos meses. Por ello, sólo podrá mantener comunicaciones los sábados por la mañana. La pasada semana se quedó sin visita.

Arkaitz Sáez Arrieta también ha sido sancionado en la cárcel de Puerto I. Askatasuna explicó que tras la visita los funcionarios quisieron registrar su cel- da y le exigieron que se desnudara. El preso político pidió una bata, pero no se la dieron, por lo que ha recibido un parte por negarse a cumplir lo demandado por los carceleros. Además, fue llevado a aislamiento y le realizaron un registro integral.