Los datos sobre la actividad de la Inspección de Trabajo en materia de Seguridad y Salud Laboral han tardado en conocerse. El Ministerio español de Trabajo y Asuntos Sociales los ha publicado esta semana. En Hego Euskal Herria, se realizaron 28.113 actuaciones -por debajo de los 29.461 controles que se siguieron el año pasado- y se detectaron 1.676 infracciones, casi en parecidos parámetros que un año antes, puesto que llegaron a contabilizarse 1.625.

Las sanciones se elevaron hasta los 7,38 millones, un 20% más que un año antes, pero sobre el conjunto de los accidentes de trabajo suponen una cantidad media de 114.000 euros, lo que no representa una cantidad económica insalvable para las empresas que incumplen la normativa.

De ahí que los sindicatos reiteren que «es más fácil pagar, que prevenir», porque sólo dos de cada cien accidentes de trabajo terminan en infracción y sólo seis de cada cien, si se tienen en cuenta las actuaciones que los inspectores abren a las empresas.

En un análisis del último trienio cerrado, la conclusión es que se realizan menos actuaciones, se detectan menos infracciones y son menos los trabajadores afectados, aunque, por el contrario, sí han aumentado las sanciones, pero no de una manera importante.

Estos datos ponen de manifiesto la escasa incidencia de la actividad de inspección. Incluso la calidad de la misma deja mucho que desear debido a que las organizaciones sindicales denuncian que existe «una cierta connivencia» entre el inspector y el responsable de la empresa para que la misma se haga bajo determinadas condiciones y en el momento en el que algunos delegados de prevención no se encuentren en la empresa.

También ocurre que algunas empresas están ocultando datos sobre accidentes de trabajo. Lo cierto es que en Euskal Herria se producen alrededor de 72.000 accidentes de trabajo anuales, incluyendo los que sufren los trabajadores autónomos.

La situación de la prevención de riesgos laborales en las empresas vascas no está mejorando. De hecho, así lo corroboran datos que el consejero Justicia, Empleo y Seguridad Social de del Gobierno de Lakua, Joseba Azkarraga, dio a conocer el pasado viernes. La encuesta sobre la salud laboral y condiciones de trabajo de 2007 muestra que un 75,1% de los trabajadores de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa reconocen estar expuestos a un riesgo alto de sufrir un accidente laboral. Es un porcentaje superior al manifestado en la 6ª Encuesta de Seguridad y Salud en el Trabajo del Estado español.

En referencia a la posición de las empresas, llama la atención que en un 44,2% de las mismas no existen delegados de prevención de riesgos laborales. Tan sólo en un 32,5% existen, mientras que el resto de trabajadores desconoce incluso si existe.

El 36,3% de los accidentes se producen durante la jornada de trabajo. Según esos datos de la encuesta, el 85% de las empresas considera que «la dirección puede intervenir eficazmente en la reducción de los accidentes y las enfermedades profesionales». Entonces la cuestión es saber por qué no lo hacen, si además es una obligación que deben cumplir porque la Ley de Prevención de Riesgos Laborales así lo indica.