El presidente somalí, Abdullahi Yusuf Ahmed, vinculó la retirada de las tropas de su aliado etíope al despliegue de una fuerza multinacional de la ONU, en una declaración realizada ante los miembros del Consejo de Seguridad, que viajaron ayer hasta Djibouti para tratar de impulsar el diálogo entre los grupos somalíes.

La Alianza para una Nueva Liberación de Somalia (ARS, dominada por los islamistas) insistió en que una retirada etíope era imprescindible para que se produjera el diálogo con el Gobierno de transición.

«Queremos, al menos, obtener un calendario para la retirada etíope para que podemos reunirnos, cara a cara, con el Gobierno de transición», declaró a la prensa el vicepresidente de la ARS, Abdurrahman, Abdishakul Warsame, tras reunirse con los embajadores de la ONU.

Por otra parte, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó ayer en Nueva York una resolución (la 1.816) por la que permite a los buques de guerra que actualmente se encuentran frente a Somalia entrar a sus aguas territoriales para combatir la piratería, tras recibir el apoyo de Mogadiscio.