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Atentado de ETA

ETA hace estallar una bomba en la rotativa de «El Correo»

El edificio que alberga la rotativa de «El Correo» en Zamudio resultó seriamente dañado en la madrugada de ayer a consecuencia de la explosión de un artefacto que, según fuentes policiales, estaba compuesto por cinco kilos de explosivo. El Gobierno español remitió al director del diario y al presidente del grupo Vocento sendos telegramas de apoyo.

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GARA | ZAMUDIO

Una potente bomba, según fuentes policiales compuesta por cinco kilos de explosivo, estalló en la madrugada del domingo en la planta donde está situada la rotativa del diario «El Correo», en el polígono Torrelarragoiti de Zamudio, causando importantes daños materiales en el edificio, aunque sin herir a ninguna de los cincuenta personas que se hallaban trabajando en su interior.

La explosión se produjo en torno a las tres de la madrugada, sin previo aviso, y fue ocasionado por un artefacto que disponía de un temporizador y que estaba introducido dentro de una mochila.

La bomba fue colocada en el muro exterior de la parte trasera del inmueble que acoge las rotativas de este periódico, que forma parte del grupo Vocento junto a otras cabeceras como «Diario Vasco» y «ABC», entre otras.

La onda expansiva destruyó un zócalo de hormigón de más de un metro de grosor que proteje la fachada y derribó unos cuarenta metros cuadrados del edificio, así como parte del tejado del inmueble.

Según informó EFE, citando fuentes del diario, los daños afectaron al edificio, pero no a las rotativas, que pudieron sacar la edición del domingo, en la que se daba cuenta del atentado.

Superar la valla de seguridad

Desde el diario vizcaino informaron también que los autores del atentado tuvieron que superar una de las vallas de seguridad que rodea el edificio, para situar el artefacto en el mismo.

La explosión, asimismo, afectó a algunos de los pabellones industriales situados en el polígono, causando la rotura de varios cristales. Al lugar se desplazaron de inmediato unidades de la Ertzaintza, que acordonaron la zona, dotaciones de bomberos y personal del Ayuntamiento de Zamudio. También se acercó la alcaldesa de esta localidad, la jeltzale Sorkunde Aiartza, que al parecer escuchó el estallido desde su propio domicilio.

La explosión obligó a los empleados que ultimaban la edición dominical a desalojar las instalaciones, aunque poco después de las cinco de la mañana pudieron volver a sus puestos.

Agentes de la Policía autonómica inspeccionaron poco después un vehículo aparcado en las inmediaciones, que les pareció sospechoso, aunque no encontraron nada en él.

Además, la sede de «El Correo» en Gasteiz fue desalojada por la mañana al aparecer un paquete sospechoso en la entrada de la redacción, aunque después se confirmó que se trataba de una falsa alarma.

Tras el atentado, este diario hizo público un editorial titulado «No nos silenciarán», en el que destaca que no es la primera vez que la organización armada actúa contra este periódico, y valora que «ETA no tiene mayor oponente que quien contrarresta sus mentiras, sus mensajes totalitarios y sus falacias criminales y los comparte con la sociedad a la que desea dominar y anular». Agrega este editorial que para ETA «la realidad es su gran enemigo, y contra ella pone bombas intentado perpetuar un engaño que le permita sobrevivir».

En parecidos términos se expresó ante los medios el director de «El Correo», Juan Carlos Martínez, que desde el lugar dl atentado sostuvo que la organización armada «no va a conseguir sus objetivos».

Telegramas del Gobierno

Martínez explicó que habían elaborado una «edición de urgencia» para dar cuenta de esta «pésima noticia», y donde se recogía el antes citado editorial.

Tanto Juan Carlos Martínez como el presidente del grupo Vocento, Diego de Alcázar, recibieron en la tarde de ayer sendos telegramas remitidos por la secretaria de Estado de Comunicación, Nieves Goicoechea, en los que les traslada su apoyo y solidaridad en nombre del Gobierno español.

Lakua acusa a ETA de tratar de «silenciar» a la sociedad

La portavoz del Gobierno de Lakua, Miren Azkarate, fue la encargada de valorar en nombre del Ejecutivo el atentado de la madrugada del domingo contra «El Correo», y en un comunicado sostuvo que a ETA «no le importa la ciudadanía, pero a la vez tiene miedo a saber, a conocer, lo que la sociedad piensa y opina de la violencia brutal y sin sentido que practica». Por ello, según Azkarate, «intenta silenciar, cambiar de opinión a la sociedad y amedrentar a los medios de comunicación».

La portavoz de Lakua dio lectura a este comunicado en Donostia, desde donde calificó el atentado como «una muestra más de la espiral terrorista y de violencia en la que se halla». A su juicio, ETA «ha vuelto a demostrar que no cree y no desea una sociedad abierta en la que las personas se expresen de forma libre».

«Los medios de comunicación, en una sociedad plural y abierta, informan y expresan, precisamente, ese pluralismo político, ideológico, social, cultural, porque es la forma que tiene la gente que vive en cualquier sociedad de expresar ese pluralismo en cualquier orden, a través de los medios», insiste el comunicado institucional.

También acusó Azkarate a la organización armada de querer «silenciar la labor de los periodistas que de una forma veraz se encargan de dar a conocer el pluralismo de ideas».

Desde el Gobierno español fue el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, el que se refirió al atentado de Zamudio, y manifestó que «jamás una bomba va a silenciar a unos periodistas, que mañana saldrán más incisivos y más combativos». «Nadie les va a amedrentar» insistió Rubalcaba en su intento de alentar a los afectados.

El ministro español acusó del atentado a «la banda de malhechores contra la que la democracia lucha». «Y con la que vamos a acabar y vamos a terminar a través del Estado de Derecho y con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», anadió en un acto celebrado en la localidad cántabra de Colindres.

También en representación del Gobierno del PSOE, su delegado en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Mikel Cabieces, condenó la explosión de Zamudio y consideró que es una «aberración sin límites querer silenciar con bombas la libre expresión de la palabra, de las ideas». «Que `El Correo' esté hoy, una vez más, en las manos de sus lectores, que pueda estarlo en la mano de todos los ciudadanos, constituye un fenomenal ejemplo de la fortaleza de las ideas frente al silencio al que nos empuja el terror», señaló en un comunicado el ex alcalde de Portugalete.

Por otra parte, la Asociación de Periodistas Vascos y el Ayuntamiento de Zamudio han convocado para hoy sendas concentraciones contra el atentado. La movilización convocada por la Asociación de Periodistas Vascos, a la que se han sumado los comités de empresa de la empresa editora del diario objeto del atentado, Bilbao Editorial Producciones, y de «El Correo», tendrá lugar a las 12.00 en la plaza del Arriaga, en Bilbo.

El Consistorio de Zamudio ha llamado a los vecinos a la misma hora ante el edificio consistorial, donde previamente se celebrará un pleno. GARA

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