PORTUGAL 2

ALEMANIA 3

El peso de la historia cayó ayer sobre las espalda de Portugal y dio alas a una Alemania que mostró su mejor versión en lo que va de torneo. Los germanos, con su rodillo, fueron superiores a un rival desdibujado y supieron aprovechar los errores lusos para golpear sin piedad.

Alemania movió rápido la pelota, la entrada del dinámico Rolfes ayudó a ello, durante los primeros minutos y eso sorprendió a los lusos, que esperaban ver más timoratos a los de Löew. Nada más lejos de la realidad, con Ballack como líder, Schweinsteiger haciendo daño con sus diagonales y las apariciones de Podolski, los centroeuropeos marcaron su terreno.

Cerca de la veintena, Portugal tuvo la primera, pero Moutinho dudo entre rematar de cabeza o empalar con el pie, pero se quedó a medio camino y su rodillazo salió alto. Inmediatamente después, Alemania dejó su sello habitual. Una doble pared habilitó a un potentísimo Podolski que desbordó a Bosingwa y centró para que Schweinsteiger, con un gran movimiento de ruptura, rematase a la red.

Primer golpe. Claro, que el estilo alemán brilla más cuando se siente cómodo y nota los primeros síntomas de aturdimiento de su rival, va a por él como una fiera y ayer volvió a ocurrir.

Las jugadas de estrategia parecían uno de los aspectos del juego donde los teutones superaban ampliamente a los lusos, teoría que también fue práctica. Así, una falta lateral sirvió a Klose para estrenarse como goleador en el campeonato.

El dos a cero obligaba a reaccionar a los lusos. Lo hicieron poco a poco, buscando la espalda de los laterales germanos, fórmula con la que encontraron mayor profundidad y capacidad para hacer daño a los alemanes. Camino que obtuvo el premio deseado con el gol de Nuno Gomes. En el descuento, Cristiano Ronaldo tuvo el empate pero su lanzamiento salió cruzado.

Tras la reanudación, ambos equipos se tantearon, el ritmo decayó y las ocasiones amainaron. Pero, Alemania volvió a golpear primero. Otra vez a balón parado y, en este caso, rozando la ilegalidad debido al empujón de Ballack a Paulo Ferreira. A la hora de rematar, el jugador nacido en la antigua Alemania Oriental tampoco tuvo mayor oposición de Ricardo, que volvió a tener una noche aciaga ante los centroeuropeos.

El partido estaba sentenciado o al menos eso parecía. El tercer tanto dejó seriamente noqueado a Portugal y sus constantes vitales prácticamente desaparecieron hasta un cuarto de hora del final del encuentro.

Postiga puso emoción

Scolari, que previamente se había equivocado al quedarse sin `nueve' referencial por retirar del campo a Nuno Gomes, enmendó su error y sacó a Helder Postiga al campo. El cambio y la pasividad de los alemanes dio emoción al tramo final. Portugal fue encerrando a Alemania en el último tercio del campo, una tarea a la que también contribuyó la sustitución de hombres como Schweinsteiger y Klose, en su caso más tarde, que habían realizado un tremendo despliegue físico tanto en defensa como en ataque durante todo el choque.

Los balones lusos al área tuvieron recompensa tras una gran jugada de Nani que remató bien Postiga. Restaban cuatro minutos más el descuento y la prorroga se convirtió en una opción posible al ver los germanos en su área. Sin embargo, Alemania volvió a tirar de manual para terminar con el sufrimiento y Podolski tuvo el cuarto cuando el partido agonizaba.