Dimite el jefe del Estado Mayor francés por los disparos de Carcasona
GARA |
El jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra francés, el general Bruno Cuche, se vio obligado a dimitir después del incidente que se registró el domingo durante una jornada de puertas abiertas en un cuartel de Carcasona, donde un militar disparó contra el público balas reales provocando 17 heridos.
Cuche, una persona respetada en el seno del Ejército, presentó su dimisión al presidente de la República, Nicolas Sarkozy, que desempeña también el cargo de máximo responsable del Ejército, que la aceptó.
«El presidente de la República, jefe de los ejércitos, ha aceptado la dimisión que le presentó el general del Ejército Bruno Cuche, jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra», declaró la Presidencia mediante un comunicado.
17 heridos de bala
17 personas, entre ellas quince civiles y niños, resultaron heridos, algunos de ellos graves, por tiros de fuego real cuando asistían a una demostración de liberación de rehenes por parte del Tercer Regimiento de Paracaídas de Infantería de Marina (RPIMa) en un cuartel de la ciudad occitana de Carcasona.
Tras destacar «el gesto» pero sin agradecer al general los servicios prestados, el Elíseo subrayó, una vez más, que el presidente «sigue con atención la diferentes investigaciones que se están llevando a cabo».
«Considera que los ejércitos tienen que asumir todas las consecuencias en cuanto a su organización y su funcionamiento», destacó también la Presidencia.
La dimisión del general Cuche se anunció después de que el ministro de Defensa, Hervé Morin, le pidiera ayer mismo que «aplicara sanciones inmediatas» por el incidente de Carcasona «sin esperar a las conclusiones de las investigaciones judicial y militar».
Justo antes de dimitir, el general Cuche suspendió al sargento de 28 años que disparó con fuego real en Carcasona. Se encontraba detenido a la espera de ser inculpado por «heridas involuntarias», ya que los jueces consideran probable la hipótesis del «error humano y de un acto involuntario».
El general Cuche se negó a realizar cualquier clase de declaración pública, pero envió un «mensaje de información» a los 160.600 civiles y militares que conforman el Ejército de Tierra francés. Este mensaje confirma su decisión de dimitir, «al asumir hasta el final mis responsabilidades».
Un alto mando militar señaló a France Presse, protegido por el anonimato, que «el jefe del Estado ha hecho valer su jerarquía ante una crisis de confianza entre el Elíseo y la institución militar».