El Gobierno israelí anunció ayer la firma de un canje de presos y cadáveres con la milicia libanesa de Hizbulah, en un acuerdo firmado en presencia del enviado alemán de la ONU, Gerhard Konrad. Mark Regev, portavoz del primer ministro israelí, Ehud Olmert, confirmó la firma del acuerdo. No obstante, matizó que Israel no ha recibido aún el informe sobre el paradero del aviador Ron Arad y que es condición sine qua non.

La firma del documento, anunciada horas antes desde Beirut por portavoces de la milicia chií, estaba pendiente desde el 29 de junio, cuando el Gobierno israleí dio luz verde a un intercambio de prisioneros para recuperar a los soldados Ehud Goldwasser y Eldad Regev, capturados en julio de 2006.

Su captura fue la excusa de Tel Aviv para invadir Líbano y bombardearlo durante 34 días.

A cambio de la entrega de Goldwasser y Regev, Israel pondrá en libertad a cuatro libaneses. Uno de ellos, Samir Kuntar, cumple condena por cuatro muertes en 1979. El canje también incluye la devolución de los restos de diez milicianos de Hizbulah, de decenas de libaneses muertos en distintas circunstancias mientras cruzaban la frontera y la entrega a la Autoridad Nacional Palestina de milicianos muertos de diversas organizaciones palestinas. Efectivos del Rabinato del Ejército comenzaron a exhumar los cuerpos que serán entregados en el puesto de Rosh Hanikra.