Juan Cavestany debuta en solitario con una tragicomedia de sabor agridulce, tras un anterior largo compartido con Enrique López Lavigne, que llevaba el esperpéntico título de «El asombroso mundo de Borjamari y Pocholo». En el Festival de Málaga «Gente de mala calidad» desconcertó a los enviados especiales, que se sintieron decepcionados ante un final abierto e incomprensible. Pero no es la primera vez que una película en la que intervienen miembros del grupo teatral Animalario deja al público sin saber a que atenerse, y no hay que olvidar que detrás está la productora Telespan, la misma de la chabacana «Días de fútbol». En fin, estando juntos Alberto San Juan y Fernando Tejero, más Javier Gutiérrez y Antonio Molero, el estilo interpretativo suele volverse muy irregular, como si no supieran distinguir sus actuaciones televisivas, de las teatrales o de las cinematográficas. Entre todos forman un grupo de amigos unidos por el patetismo, ya que ninguno de ellos vive una realidad cercana a sus sueños de juventud. Es la falta de realización la que mide su baja calidad personal.