GARA > Idatzia > > Euskal Herria

Ingresa en la prisión de Iruñea el autor confeso de la muerte de Nagore Laffage

José Diego Yllanes, quien ha confesado ser el autor de la muerte de Laffage, permanece desde ayer en prisión. La juez considera que «existen indicios racionales de criminalidad». En las calles se siguen repitiendo los actos de repulsa contra este nuevo caso de violencia sexista.

p017_f02_111x111.jpg

GARA |

La juez instructora de Agoitz decretó, tras su declaración, el ingreso en prisión de José Diego Yllanes Vizcay, de 27 años, como presunto autor de la muerte por asfixia de Nagore Laffage.

En el auto se destaca en primer lugar que, en la declaración prestada primero ante la Policía y, posteriormente, en el juzgado, el imputado reconoció ser el autor de la muerte de la joven, a la que, según aseguró, «no conocía con anterioridad». Sin embargo, ambos acudían habitualmente a la Clínica Universitaria de Iruñea, donde Laffage estudiaba Enfermería y el acusado trabajaba en la Unidad de Psiquiatría.

La juez también se basa en las manifestaciones de dos testigos para corroborar la autoría de la muerte por parte del inculpado y, en este sentido, explica cómo Yllanes llamó a un amigo para decirle que había realizado «algo muy malo». Además, al parecer, le contó que se encontraba en el interior de su vivienda «una chica muerta» con la que había estado y que no tenía intención de entregarse a la Policía, ya que no quería «arruinar la vida de su familia». El testigo, según relata la juez, le conminó a acudir a la Policía, a lo que el inculpado se negó.

Por otra parte, según consta en la resolución judicial, la tesis de que el imputado estuvo con la víctima la mañana del 7 de julio viene corroborada por la declaración de un testigo protegido que afirma que coincidió con ambos sobre las 7.45 en el portal.

Sobre el lugar en el que se produjo la muerte, la juez apunta que está probado tanto por la declaración del encausado como por las pruebas aportadas por la Policía Foral que los hechos tuvieron lugar en el domicilio de él, ubicado en el barrio de Donibane de Iruñea.

A la conclusión de la declaración, el Ministerio Fiscal solicitó el ingreso en prisión del detenido, ya que, a su juicio, el imputado cometió «un delito de homicidio», tal y como se deduce de la comisión de los hechos, mediante asfixia.

La defensa, por su parte, se opuso al entender que el hecho de que el inculpado no se hubiera fugado tras haber hablado con sus padres y después de que éstos hubieran llamado a la Policía, pone de manifiesto su «falta de intención de sustraerse a la acción de la justicia».

«Medidas proporcionadas»

En la resolución, la juez acuerda la prisión provisional para impedir que el imputado se fugue y porque, según asevera, esta medida cautelar resulta proporcionada «a la gravedad de los hechos denunciados».

Al respecto, sostiene la juez que, tras la matar a Laffage, Yllanes pudo comunicar lo ocurrido a la Policía, cosa que no sólo no hizo, sino que además «procuró deshacerse del cuerpo de la víctima», así como de sus pertenencias, dejándolas en un lugar apartado.

Mientras tanto ayer se seguían repitiendo las muestras de repulsa por la muerte de la joven de Irun. Precisamente, en la localidad en la que vivía Laffage se llevó a cabo una concentración a las 19.00 bajo el lema «Nagore eraila! Matxismoak hiltzen gaitu».

También hubo protestas en Bilbo (60), Algorta (25), Donostia (100), Errenteria (250), Zarautz (100), Tolosa (23), Azpeitia (40), Lizarra (50) y Gasteiz (350), convocadas por la Plataforma de Euskal Herria para Marcha Mundial de Mujeres.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo