La escalada de tensión entre Hamas y al-Fatah se cobra cuatro vidas
La escalada de tensión registrada en los últimos días entre las organizaciones palestinas de Hamas y al-Fatah ha causado al menos cuatro muertos y más de sesenta heridos en las últimas horas en Gaza, como consecuencia de varios enfrentamientos. El movimiento de resistencia islámico acusó, además, a las fuerzas lideradas por Mahmud Abbas de haber secuestrado y amenazado de muerte a uno de sus dirigentes políticos, Mohammed Ghazal, en Nablus.
GARA |
Al menos cuatro personas murieron y más de sesenta resultaron ayer heridas, siete de gravedad, en enfrentamientos entre fuerzas de seguridad de Hamas, que controla la Franja de Gaza desde junio de 2007, y miembros de un clan cercano al movimiento al-Fatah en la ciudad de Gaza. Entre los heridos figuran varios milicianos del movimiento de resistencia islámico, algunos en estado crítico.
Esta nueva escalada de tensión entre las principales organizaciones palestinas estalló el pasado día 25, cuando una bomba mató en Gaza a cinco activistas de Hamas y una niña. La acción fue atribuida por las autoridades gazatíes a al-Fatah y al día siguente comenzó una ola de detenciones cruzadas en Gaza y Cisjordania de decenas de miembros de al-Fatah y Hamas. Organizaciones de derechos humanos han denunciado que los arrestados han sido objeto de abusos y torturas, en una espiral de violencia que ha disparado la tensión entre los dos movimientos más representativos del pueblo palestino.
Estas redadas, que concluyeron el viernes con el arresto de 17 dirigentes de al-Fatah, no han tardado en derivar en enfrentamientos armados. Durante la noche de ayer se produjeron tiroteos y explosiones en la ciudad de Gaza, como consecuencia de las cuales fallecieron un policía de Hamas y un miliciano de las Brigadas Ezzedin al-Qassam, mientras que los otros dos fallecidos no habían sido identificados.
Los choques comenzaron a primera hora de la mañana, después de que fuerzas de Hamas cercaran el barrio gazatí de Shuja'iyya, controlado por el clan Helis, miembro de al-Fatah, y donde sospechaban que se escondían los autores de las explosiones del día 25. Durante los enfrentamientos se produjeron disparos de mortero y armas automáticas, y fueron detenidas quince personas.
Al-Fatah negó cualquier relación con aquellos atentados, que atribuyó a conflictos internos en el seno de Hamas.
Secuestro
La tensión siguió en aumento durante el día después de que Hamas acusara a al-Fatah de secuestrar durante varias horas en nablus (Cisjordania) a su dirigente político en Nablus, Mohammed Ghazal.
Éste había sido detenido el jueves en el marco de las redadas cruzadas y liberado un día después, y ayer fue capturado por miembros de las Brigadas de los Mártires de al-Aqsa, brazo armado del movimiento que lidera el presidente de la Autoridad Palestina (ANP), Mahmud Abbas. Los secuestradores dieron, vía telefónica, un ultimátum al Gobierno de Ismail Haniyeh para que pusiera fin a los enfrentamientos en Shuja'iyya si no quería que Ghazal fuera ejecutado.
Ghazal, que fue secuestradocuando volvía de rezar en la mezquita, fue finalmente liberado y entregado a representantes del gobernador de Nablus.
Cinco palestinos murieron por asfixia y 18 resultaron heridos al taponarse en Egipto la entrada de un túnel subterráneo que unía el territorio de ese país y el de Gaza. Las autoridades egipcias cegaron la entrada del pasadizo el viernes y la falta de oxígeno causó la tragedia.
Israel dejó ayer entrar en su territorio a decenas de miembros de al-Fatah que huían de la franja de Gaza, entre los que había varios miembros del clan Helis. Una treintena de miembros de la organización del presidente de la Autoridad Palestina (ANP), Mahmud Abbas, acudieron al paso fronterizo de Nahal Oz.
La decisión de abrir la frontera fue tomada por el ministro israelí de Defensa, Ehul Barak, atendiendo a la solicitud de Abbas y de su primer ministro, Salam Fayyad. Los heridos fueron llevados hospitales hebreos y el resto, trasladados a Ramallah.