El presidente de Osetia del Sur, Eduard Kokoity, acusó a su vecina Geogia de orquestar matanzas contra civiles osetos y anunció la evacuación de los niños, mujeres y ancianos de la capital, Tskhinvali, y sus alrededores hacia campos de refugiados ubicados en Osetia del Norte, un día después del ataque de las tropas georgianas que causó seis muertos.

En su web oficial, Kokoity acusó a Georgia de centrar sus ataques específicamente contra los jóvenes osetos y en las áreas residenciales de la capital.

El Gobierno georgiano negó los hechos y acusó a Osetia del Sur de atacar primero a sus fuerzas, que se vieron obligadas a responder. «Éste es otro intento de involucrar a Georgia en un conflicto militar», señaló el ministro de Estado para la Reintegración, Temur Iakobashvili.

Georgia acusa a Moscú de intentar anexionarse Osetia del Sur y Abjasia, que se declararon independientes inmediatamente después de la desintegración de la URSS, en represalia por los intentos de la ex república soviética de entrar en la OTAN.

Moscú llamó ayer a ambas pates a la «moderación y buena voluntad» para solucionar la crisis. «La parte rusa está inquieta por la escalada de la tensión y adoptará medidas enérgicas para impedir que el conflicto vaya más lejos», señaló en una nota, en la que se afirmaba que Osetia tuvo que hacer frente la víspera a un ataque «masivo».