Tras la esperada bajada de Celedón, que metió a Gasteiz de lleno en sus fiestas, el Torneo de La Blanca de pelota a mano arrancará hoy a la noche con el enfrentamiento entre Olaizola I-Beloki y Berasaluze VIII-Barriola (23.15, ETB-1). Un partido atractivo que reúne a los dos zagueros finalistas del Torneo de San Fermín y a la única pareja mixta de la competición.

Es, precisamente, la dupla formada por Pablo Berasaluze y Abel Barriola la que más interés ha suscitado entre los aficionados. El delantero de Berriz está viviendo su segunda juventud tras un largo periodo lleno de problemas personales. Hay un dato demoledor. En lo que llevamos de 2008, el vizcaino ha ganado 26 de los 38 partido que ha disputado (68%) y llega al Ogeta depués de ganar sus dos últimos encuentros en Luzaide y Lemoa -ambos por 22-19-.

Barriola será su compañero de fatigas. El triunfador de sanfermines, con cuatro victorias en cuatro partidos y dos títulos en el bolsillo, querrá repetir actuación en el segundo torneo veraniego de la temporada. Además, el de Leitza ya culminó con gran éxito la experiencia interempresarial del año pasado, cuando se impuso en Donostia y en Logroño con la ayuda de su paisano Oinatz Bengoetxea.

El partido podría equivaler a una fase de cuartos de final, ya que el ganador se medirá con Titín III y Pascual en la semifinal del jueves. En la otra rama, en cambio, el ganador del Bengoetxea VI-Begino/Xala-Lasa III, que se juega mañana, entrará directamente en la final.

Con la duda de Asier

La pareja que formarán Asier Olaizola y Rubén Beloki ofrece más dudas. El delantero de Goizueta no ha vuelto a jugar desde que cayera derrotado el pasado 27 de julio en Zarautz, con Begino ante su hermano y Patxi Ruiz, ofreciendo una pobre imagen. El mayor de los Olaizola tampoco brilló en sanfermines, por lo que habrá que ver si ese puntito de frescura le ayuda a dar su verdadero nivel.

En la zaga, Beloki ofrece más garantías. El de Burlata también lleva unos diez días sin vestirse de blanco y en Iruñea ya demostró que cuando está fresco es capaz de plantar cara a cualquiera.