Una granada colocada ante una vivienda de Bilbo pone en alerta a las FSE
GARA |
Una granada colocada en el descansillo de una vivienda de Bilbo encendió las alarmas de las FSE por si se trataba de un acción realizada por ETA. Pero, para el mediodía, las pesquisas policiales achacaron el hallazgo del artefacto a «un ajuste de cuentas» por drogas.
Un particular alertó a la Policía Municipal de Bilbo en torno a las siete de la mañana sobre la existencia de un objeto sospechoso colocado en el descansillo del segundo piso de un edificio ubicado en la calle Ugarte de la capital vizcaina.
En un principio, las investigaciones policiales se encaminaron a pensar que el ataque podía estar dirigido a un ex edil del PP de Arrigorriaga que vive en un edificio aledaño.
Sin embargo, la composición del artefacto, que según se informó estaba confeccionado de una forma muy rudimentaria -sobre la granada, a la que retiraron el dispositivo de explosión, se colocaron varias hojas de papel a las que se prendió fuego-, encaminó las investigaciones policiales hacia otros ámbitos.