Acoso mediático continuado en los tribunales
La petición de la Fiscalía de la Audiencia Nacional española de citación a declarar como imputado a Iñaki de Juana después de que ciertos medios de comunicación hayan venido insistiendo en que el contenido de la carta leída en la bienvenida al ex preso vasco es delictiva, es buena muestra del funcionamiento a golpe de medio de la judicatura española, especialmente cuando de asuntos relacionados con Euskal Herria se trata. Resulta llamativa y, en cualquier caso, lamentable por sus consecuencias, la utilización de la judicatura en los cálculos políticos del Gobierno español, cada vez más indisimuladamente. El acoso mediático al que ha sido sometido el ex preso vasco ha tenido continuación una y otra vez en instancias judiciales, siempre según esos cálculos del Gobierno español, tanto cuando De Juana se encontraba en prisión, con resultado de una condena por dos artículos de opinión, como desde el momento de su excarcelación. Se puede decir que ese proceder no es serio, y en verdad no lo es; pero además es injusto.
Según la propia Audiencia Nacional, las diversas policías no han podido confirmar que la carta fuera escrita por De Juana, pero la presión mediática impide andarse con remilgos. Por otro lado, desde varios medios poco menos que han sentenciado que el contenido de la misma es delictivo.