Raimundo Fitero
No era eso
Cabe algún tópico más sobre Paul Newman? Tenemos su filmografía, su compromiso, sus salsas y su decisión final ejemplar: irse a morir a su casa rodeado de los suyos. El resto es cuestión de gacetilleros, oportunistas y amantes de wikipedia. Nos pueden provocar una irritación intestinal con tantos «ojos azules», y demás soniquetes de recurso barato, pero miren su obra y verán que ha sido un gran artista. Su muerte llegó para relativizar la comunicación de una decisión del jurado en Donostia, las cadenas internacionales con más reflejos ya sacaron de madrugada alguna de sus películas, y los noticiarios se dotaron de lo que tenían a mano y de las imágenes más redundantes. Yo diría: no era eso, pero probablemente, también era eso.
Uno tenía una duda metodológica, ¿puede el circo convertirse en una inspiración para un reality show? Y tenemos una respuesta a medias. Puede. Pero no parece que la opción tomada en Cuatro, sea, hasta el momento, ni muy apetecible televisivamente hablando, ni el circo, ese mundo tan complejo, espectacular y colocado en un ámbito del imaginario colectivo salga muy reforzado de estos intentos, con más buena voluntad que acierto.
La parte positiva es que se acercan al circo quitándole las connotaciones únicas de payasos y parodias. Que se dedican a mostrar la parte más atlética, los ejercicios de equilibrios, telas, mano a mano, trapecios, lo que nos da una visión no completa. Nos parece importante que exista un diccionario para explicar términos que describen movimientos, ejercicios, aparatos. Pero después todo ello, queda bajo los focos y las cámaras, en un decorado pulcro, como desposeído de verdad. El circo son horas de trabajo, sudor, repeticiones, y aquí, se ven, pero en una versión aséptica. Y después está, precisamente, el componente de reality, que le dota de un espíritu competitivo muy fotogénico que parece contradictorio con el alma circense. Aquí diríamos lo mismo: no era eso. Pero en Cuatro están fijándose en un modelo universalizado de circo preciosista, uniformador, una gran empresa del entretenimiento, Le Cirque du Soleil, que es, a su vez, una suministradora de muchas horas de televisión. En ETB lo saben.