CRÓNICA Campaña de vacunación
Gabriel Inclán resta importancia a la alerta de una epidemia de gripe «más agresiva»
El consejero de Sanidad de Lakua restó importancia a la alerta emitida por instituciones sanitarias internacionales de que la gripe será más virulenta que otros años. Gabriel Inclán defendió ayer en Bilbo que no se puede predecir la mutación del virus, aunque saludó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no baje la guardia en su prevención.
Agustín GOIKOETXEA
Las autoridades sanitarias de la CAV no prevén que la gripe sea «más agresiva» que en años anteriores, a pesar de que desde la OMS y los laboratorios Sanofi Pasteur, uno de los más punteros del mundo en el ámbito de la vacunación, se alertara hace semanas de la posible llegada a Europa en los próximos meses de una epidemia «severa».
Gabriel Inclán defendió que resulta «imposible» llegar a una previsión exacta. De cara a vigilar la incidencia de esta enfermedad infecciosa, cuyos casos se incrementan a finales de otoño y principios del invierno, Osakidetza dispone de una red de médicos de familia que recogen datos en las consultas que atienden a 50.000 personas -el 2% de la población de la CAV- y en los servicios de urgencias.
La temporada pasada el incremento de los casos se detectó a partir de la última semana de noviembre, registrándose el pico epidémico en la segunda semana de enero con una tasa de 389 casos por 100.000 habitantes, que remitió paulatinamente en febrero y marzo. El consejero consideró que la intensidad de los contagios fue «ligera».
Subrayó que la medida preventiva más eficaz para atajarla es la vacunación. «La vacuna evita la infección en muchos casos y, en los demás, reduce la intensidad de la enfermedad y sus complicaciones», puntualizó.
Inclán señaló que la vacunación antigripal ocasiona una disminución de la probabilidad de contraer la enfermedad entre un 70 y 90 por ciento en personas sanas y de hospitalización (50-60%) y de mortalidad (80%).
Por tal motivo, Osakidetza iniciará desde mañana hasta el 15 de noviembre su campaña de vacunación, en la que prevé distribuir 420.000 dosis entre personas mayores de 65 años, personas afectadas por patologías con carácter crónico como bronquitis, diabetes, cardiopatías e insuficiencia renal, entre otras, así como el personal sanitario. Inclán destacó la importancia de repetirla todos los años.
Los interesados deberán acudir a su médico habitual, el cual les facilitará el volante necesario para recibir la vacuna.
En Nafarroa, la campaña se desarrollará del 20 de octubre al 16 de noviembre, distribuyéndose 104.000 dosis. En ellas, elaboradas por laboratorios europeos, al igual que en la CAV, se incluirán tres nuevas cepas, dos detectadas en las últimas temporadas en Australia y la otra en Estados Unidos. Hace dos décadas que no se incorporaban tantas mutaciones a la vacuna.
El consejero de Sanidad del Gobierno de Gasteiz recordó ayer que hace dos años los casos en Australia se multiplicaron por siete. Este año se han triplicado respecto a los detectados en el último lustro. Los cambios introducidos, confesó, son los que han retrasado el comienzo de la campaña de vacunación.
Gabriel Inclán insistió en que la gripe es una enfermedad vírica, por lo que no está indicada el uso de antibióticos. «Es una enfermedad molesta pero benigna en la población sana y suele resolverse con reposo, ingesta de abundantes líquidos y medicación de apoyo, antitérmicos principalmente. Sólo es necesario acudir al médico -aclaró en rueda de prensa- cuando aparecen dificultades para respirar, si no se cura la tos en 10 días o si se forma parte de alguno de los grupos de riesgo».
El consejero de Sanidad añadió que su contagio puede prevenirse con medidas higiénicas sencillas como la protección frente a la tos y al estornudo, y el lavado frecuente de manos.