Baztarrika reconoce «posturas opuestas» en el debate sobre política lingüística
El balance de cinco meses de andadura de Euskara 21, iniciativa con la que Lakua pretende poner las bases de la futura política lingüística, pone de manifiesto «amplios desacuerdos» y «colisiones frontales». Así lo admitió ayer el viceconsejero, Patxi Baztarrika.GARA |
El debate iniciado desde Lakua con el fin de definir una política lingüística ha suscitado ya «amplios desacuerdos». Así lo reconocía ayer el viceconsejero de Política Lingüística, Patxi Baztarrika, en la comparecencia ofrecida para presentar la actividad desarrollada durante cinco meses por la iniciativa denominada Euskara 21, donde aseguró que han quedado patentes «colisiones frontales entre posturas claramente opuestas».
Pese a ello, el viceconsejero afirmó que también se aprecian puntos de entendimiento que no le hacen renunciar a lograr un acuerdo en torno a la política lingüística. Defendió ante los medios que éste es «necesario» y apostó por revitalizar el euskara «a través de un consenso social y político lo más amplio y solido posible».
El objeto de la iniciativa puesta en marcha hace cinco meses por el Consejo Asesor del Euskara de Lakua sería definir las bases de la política lingüística de principios del siglo XXI «mediante un proceso de debate y de reflexión».
A juicio del viceconsejero, la cuestión del euskara «no es sólo de los vascohablantes», y resaltó que «afecta a la convivencia y a la cohesión social», agregando que «nadie debe de ser, por tanto, excluido de la discusión sobre el futuro del euskara». En esta línea, detalló que el debate está abierto a todas las ideas y posiciones, «pero no a las descalificaciones extremas que no sirven para construir nada», apostilló.
Acompañado por seis de la treintena de miembros que integran la comisión que redactó la ponencia base, el viceconsejero de Política Lingüística calificó de «muy fructífero el debate amplio y vivo» que se ha registrado a través de la web euskara 21.euskadi.net. Indicó en este sentido, que la página ha recibido la visita de unas 18.600 personas y alrededor de 2.100 aportaciones por escrito.
Próximos meses
A partir de ahora se elaborará el informe definitivo, que se espera para finales de año.
Asimismo, la viceconsejería llevará a cabo en octubre y noviembre una «socialización» de este proceso con presentaciones y seminarios dirigidos a sectores y organizaciones, al tiempo que ha convocado un concurso de eslóganes.
Mientras que Baztarrika hablaba de nueva política lingüística, el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, se refirió ayer al debate sobre los modelos lingüísticos dejando claro de modo indirecto que su formación discrepa de la reforma propuesta por el Departamento de Educación, en manos de EA.
En una entrevista a Radio Euskadi, Urkullu manifestó que el PNV está abierto a «una reflexión» con EA sobre los modelos lingüísticos, pero matizó que «lo que entendemos es que todas las cosas que hayan de proyectar desde el propio Gobierno Vasco tienen que estar previamente habladas entre los socios del Gobierno Vasco. A partir de ahí, desde un mínimo juego de lealtades, estamos abiertos a cualquier debate o reflexión».
Todo apunta a que la reforma de los modelos lingüísticos que lidera la consejería de Tontxu Campos (EA) tiene pocos visos de ser aprobada, pese a los compromisos previos. Las discrepancias mostradas por el PNV en agosto, aludiendo a la conveniencia de hacer pruebas-piloto antes de emprender un modelo basado sobre todo en el euskara como lengua vehicular, apunta a que bloqueará el plan, lo mismo que PSOE y PP.
Con las ideas extraídas de las aportaciones y los comentarios que harán al respecto los miembros de la comisión, se redactará un informe definitivo con bases para la futura política lingüística.