Liga asobal
San Antonio se deja un punto en casa, y gracias
GARA | IRUÑEA
Pudo haber ganado, con un tiro final de Kjelling que detuvo Gurutz Aginagalde sobre la bocina, pero también pudo haber perdido, fruto de los innumerables errores en el lanzamiento y no menos innumerables pérdidas de balón. Al fin y a la postre, Portland San Antonio debió conformarse con el empate a 30 frente a un Naturhouse La Rioja muy correoso. Empató, sí, pero no es mal resultado.
La igualdad siempre estuvo presente en un partido duro y sin concesiones. Aunque los de Villaldea llevaron la iniciativa en la primera mitad, jamás tomaron ventajas mayores al par de goles, con Kjelling y Ratko Nikolic como mejores elementos. Por contra, el cuadro antoniano perdía a Jacobsen -el día de su regreso- por culpa de un esguince de tobillo.
El choque se complicó en la segunda mitad. Animados por Aginagalde, el cuadro riojano tomó la delantera, con los Amargant, Belaustegi y, sobre todo, el extremo izquierdo Stojanovic martilleando la portería navarra. En el peor momento, Naturhouse llegó a tener hasta cuatro goles de ventaja: 22-26.
La reacción del Portland, a pesar de las múltiples acciones precipitadas que protagonizaron, no podía tardar. Y qué mejor revulsivo que Thomas Svensson. El portero sueco impuso el ritmo defensivo, liderando un parcial de 8-3, con el que los de Villaldea se adelantaban 30-29. Amargant empataba a 30 y el marcador, aun con tiro de Kjelling, ya no se movió.
Frialdad para Arrate
Por otro lado, el técnico de la Juventud Deportiva Arrate, Julián Ruiz, estimaba ayer que su equipo adolece de «falta de frialdad», aunque confía que su equipo supere éstas y otras carencias.
El preparador de los guipuzcoanos lamenta que ante el Teucro no fueran capaces de rentabilizar su mejor juego, ya que en ciertas fases fallaron «muchos lanzamientos fáciles» y en los momentos para romper un partido «hay que tener frialdad para muchas cosas como, por ejemplo, para meter el balón dentro». Ruiz lamentaba que su equipo no fuera capaz de «leer bien el partido».
A pesar del mal inicio, la confianza reina en las filas eibarresas. Pese a la inminente visita del Pevafersa Valladolid a Ipurua, el conjunto eibarrés «está capacitado para ganar a cualquiera», según Sergio Berrios.
El extremo andaluz, que cumple su segunda temporada en Eibar, no tuvo dudas acerca de que conforman «un equipo muy competitivo» que siempre obligará al adversario a «sudar mucho».