El Baskonia afronta un clásico de la ACB con su columna vertebral tocada. Los de Ivanovic visitan el Carpena sin Tiago Splitter y con las dudas de su capitán Sergi Vidal y el base Pablo Prigioni, que arrastran distintos problemas físicos.

Con Aíto García Reneses como abanderado de su renovación, el equipo malagueño ha arrancado la temporada muy fuerte y llega como líder tras machacar el jueves al Cajasol a domicilio por 60-91. Kelati, Cook y Archibald son las caras nuevas de un equipo que mantiene a de la pasada temporada a pilares como Ndong, Haislip y un Jiménez que juega su partido 500 en ACB.

Dusko Ivanovic, que sigue fiel a su idea de no quejarse por las bajas, señaló en la previa que «hemos preparado el partido sin Vidal y sin Prigioni. Ninguno de los dos se entrenó tras el encuentro contra el Ricoh Manresa, dado que ambos jugadores sufren dolores en sus respectivas zonas dañadas».