Barretina y estilo para recuperar los títulos
B.Z. | BILBO
Tras convertirse el vestuario de su primera plantilla en una mezcla entre «La hoguera de las vanidades» y «Fiebre de sábado noche», el crédito de Joan Laporta parecía acabarse. Una moción de censura le pisaba los talones y la situación deportiva de su equipo era un desastre. Ni él ni Rijkaard habían sabido extirpar determinadas conductas a tiempo y el desarrollo de las mismas les podía sacar del club. Ante ello, Laporta decidió dar un golpe de efecto apostando por Guardiola como nuevo técnico. Bendecido por Cruyff, su mentor, el nombramiento suponía una vuelta a las raices. Barretina como receta para la depresión. El orgullo como analgésico para la crisis.
El hombre elegido para capitanear la nave culé proyecta una imagen moderna. Un entrenador que con un sólo año de experiencia ya busca desarrollar los mismos conceptos que en su brillante etapa como futbolista. Tocar y mover rápido la pelota en busca del espacio. Ganar, sí se puede, jugando bien. Genuino proyecto de La Masia y miembro de la estirpe del «4» patentada por Cruyff, no ha dudado en apostar por Sergi Busquets. Apenas ha necesitado seis encuentros, incluido un concluyente 6 a 1 al Atlético, para disipar las dudas de un entorno tan viciado como desmemoriado.
Catalán universal, apasionado de su cultura y defensor de la oficialidad de las selecciones propias, representa un soplo de aire fresco frente a la oleada de deportistas que en aquel país han minimizado la importancia del origen y la identidad. Una persona con estilo para intentar recuperar la senda de los títulos.
Lugar. Santpedor > Año: 1971. > Trayectoria como jugador: Cantera del Fútbol Club Barcelona, Barcelona, Brescia, Roma, Brescia, Al Ahly y Dorados de Sinaloa. > Trayectoria como entrenador: Barcelona Atlétic y Fútbol Club Barcelona.