Considera que es necesario impulsar el área de apoyo a los pensionistas y personas mayores porque «los problemas se arreglan desde la unión que nos hace fuertes». Explica que la mujer es la que peor parada sale en este proceso, puesto que tiene pensiones más bajas, y manifiesta que «las medidas del Gobierno Vasco de alcanzar los 700 euros las pensiones bajas es insuficiente».

¿Por qué cree que es necesario trabajar en el Área de Pensionistas de LAB?

Aunque la gente se jubile o sea pensionista, no se ha terminado la lucha en favor de nuestros derechos, porque una vez que te jubilas seguimos teniendo problemas. No sabemos dónde tenemos que acudir a resolver las inquietudes y reclamar los derechos que tenemos para solicitar ayudas o soluciones. Por eso, tenemos que seguir organizados para hacer frente a los problemas que nos surgen.

¿Son las mujeres las más afectadas por las malas condiciones económicas de las pensiones?

El colectivo que más problemas tiene es el de las mujeres, el de las viudas, las amas de casa. Son pensionistas con unas pensiones ridículas. No se puede vivir con esa miseria, aunque el Gobierno vasco nos quiera plantear llegar a los 700 euros. Es bajísimo para el nivel de vida que hay en Euskal Herria.

La unión hace la fuerza. ¿Es por eso necesaria esa nueva área en LAB?

Sin duda. Tengo muy claro que estar en una organización como LAB nos dará una mayor fortaleza en nuestras inquietudes. Las asociaciones de jubilados, que existen, aspiran a tener un bar, a jugar a las cartas, etc. Está bien el ocio, pero cuando se plantean reivindicaciones no tienen dónde ir y reclamar. Con el área de LAB queremos que todos esos colectivos de las asociaciones vean la necesidad de estar en un sindicato para actuar en su bien.

¿Tiene futuro el sistema público de pensiones?

Si tuviéramos las competencias en Euskal Herria tendría más futuro. Creo que con esa competencia lo haríamos mejor, ¡otro gallo nos cantaría!

¿Qué llamamiento haría a la gente?

Cada uno que haga lo que pueda hacer. Veo que estamos pocas mujeres. Lo más importante es que las mujeres se integren, porque es el colectivo más desfavorecido con las pensiones. J. B.