Cinco atentados con coche bomba se registraron ayer contra edificios estratégicos y de la ONU en las territorios independentistas de Somaliland y Puntland, en Somalia.

Estos atentados, cometidos casi simultáneamente en Hargeisa, capital de Somaliland, y Bosasso, capital de Puntland, se producen en el momento en que los miembros de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD), que agrupa a siete estados de África del Este, están reunidos en Nairobi para buscar los medios para superar el caos que vive Somalia tras 17 años de guerra civil.

El domingo, se firmó un acuerdo bajo el patrocinio de la ONU entre el Gobierno somalí y la oposición islamista moderada con el objetivo de alcanzar un alto el fuego. Este acuerdo fue categóricamente rechazado por los shebab, combatientes islamistas radicales.

Los atentados más mortales se registraron en la capital de Somaliland, donde murieron al menos 20 personas en tres atentados contra el Palacio presidencial, un edificio de la ONU y la representación diplomática de Etiopía.

En Bosasso, hubo otros dos atentados contra la sede de los servicios de información de Puntland, provocando heridas a seis agentes de este cuerpo policial.

EEUU apunta Al-Qaeda

La secretaria de Estado adjunta para Asuntos Africanos de EEUU, Jendayi Frazer, señaló que pese a que aún no había reivindicación de los atentados de Somaliland y Puntland, «llevaban el sello de Al-Qaeda».

Frazer se encontraba en Nairobi para participar en la reunión de la IGAD sobre el alto el fuego en Somalia.