Ruben PASCUAL

«La cárcel es generadora de enfermedades, por falta de asistencia adecuada, por la falta de interés de los responsables, por la falta de prevención y por el retraso en las pruebas necesarias para diagnosticar las enfermedades, agravando así el riesgo de infección». Son las pala- bras que dan inicio al manifiesto que se presentó ayer en la concentración que Etxerat realizó ante el hospital de Basurto.

Ane Miren Gamboa, miembro de Etxerat, e Iñaki Gallo, trabajador de Osakidetza, fueron los encargados de leer el texto que reivindica la asistencia médica debida para los presos políticos. Según señalaron, se trata de un llamamiento «a la sociedad vasca, en general», pero especialmente a las y los profesionales que trabajan en la defensa y el cuidado de la salud, a quienes plantean que «den una respuesta lo más eficaz posible a esta grave situación».

Gamboa incidió en que la escasez de asistencia sanitaria en prisión es más latente «en el caso de nuestros familiares presos y presas políticas vascas debido a la política penitenciaria especial que se les aplica».

En ese sentido, denunciaron que «se les deniega o limita la asistencia de médicos de confianza, los traslados al hospital no se realizan o bien se realizan en pésimas condiciones, les dispersan, les alejan y además, en muchos casos, les mantienen aislados».

Etxerat subrayó el caso de los catorce presos vascos que sufren enfermedades «graves e incurables» para los que «exigió la inmediata puesta en libertad».

Después Iñaki Gallo, que habló en nombre de los profesionales que trabajan en la defensa y el cuidado de la salud, expuso cuáles son las reivindicaciones que pide el manifiesto que firmarán los distintos profesionales de la salud y que también se abrirá al resto de la sociedad. Según explicaron los representantes de Etxerat, el colectivo tiene la intención de realizar una recogida de firmas para «demostrar nuestra solidaridad tanto a los presos que están enfermos como a sus familiares, y exigir la asistencia sanitaria que, a nuestro juicio, no está garantizada en estos momentos».

Tras la recogida de adhesiones al manifiesto, indicaron que «se trasladará nuestra petición a Osakidetza y al Departamento de Sanidad».

Cabe subrayar que Bilbo no fue el único lugar donde se llevaron a cabo estas revindicaciones, ya que se realizaron concentraciones en todas las capi- tales de Hego Euskal Herria. Así, en Bizkaia las protestas tuvieron lugar en los hospitales de Galdakao, Gurutzeta y Basurto, reuniendo a 100, 90 y 110 personas respectivamente. En Gipuzkoa, 130 personas respondieron a la convocatoria ante el Hospital Donostia y otras 80 se dieron cita frente al Oncológico. En tierras alavesas, 250 personas secundaron el llamamiento y se concentraron frente al centro hospitalario de Txagorritxu, mientras que otras 200 acudieron a la cita ante el hospital de Santiago. Y en la capital navarra, unas 180 se reunieron ante el edificio de Consultas Externas.