Nadie entiende las prisas con las que BBK y Kutxa han abordado, al margen de Vital, el proceso de integración en lo que será la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Euskadi-Euskadiko Aurrezki Kutxa eta Bahitetxea. A finales de mes, el día 28, se votará la fusión en las asambleas.

Hace tres años y medio los presidentes de las cajas de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa afirmaron que el proceso no se entendería sin el concurso de las tres. Sin embargo, han variado de idea debido al rechazo de los órganos de decisión de la caja alavesa. Se olvida, sin embargo, decir que la llave del «proceso a tres» está y ha estado en Lakua, que tiene que aprobar una nueva ley de cajas. Xabier Alkorta habla de la integración y afirma desconocer que Xabier Irala, presidente de BBK y de la futura caja, esté al frente hasta 2011.

¿Por qué la fusión a dos?

Tenemos una dificultad de crecimiento en nuestra zona de actuación natural. Las tres cajas, pero también la navarra. Hasta ahora parecía que cuanto más se crecía, más fuerte se era; no es así, si eres fuerte en capitalización, sí. Las cajas vascas tenemos una cuota de mercado en un territorio pequeño en el que no podemos avanzar mucho más. En cambio, tenemos capacidad de crecer y lo tenemos que aprovechar saliendo fuera. Es una opción estratégica.

Pero eso, ¿lo han hecho ya de forma individual?

Por separado, pero hay que ver el futuro. Hemos agotado niveles de sinergias y colaboración, particularmente con Vital, que se ha gestionado bien para su tamaño. En el ámbito informático tenemos sinergias, lo mismo que en el campo del negocio de los seguros, de Norbolsa, de agencias de viajes. Hemos avanzado en ese camino, pero ya está agotado.

¿Qué cabe para el futuro?

Extenderse a Navarra, ya que Caja Navarra ya lo ha hecho en nuestro territorio.

¿Hay una guerra entre ustedes?

Estamos en competencia.

Pero las cuatro integran la Federación Vasco-Navarra y había un pacto de no agresión

No. Las cajas de la Federación Vasco-Navarra habíamos considerado que teníamos mucho más que ganar fuera que compitiendo en nuestro terreno.

Había un acuerdo tácito

Había una práctica de no competencia, que rompió Navarra.

Han contraatacado

Sí, claro. Nosotros, BBK y Vital. Pero el escenario actual supone debilitarnos entre nosotros abriendo más oficinas o aprovechar las sinergias. Al margen de la coyuntura, la recesión económica en que estamos sumidos y que puede durar dos años avala más la tesis de la integración, pero es estructural y se formula en un momento de no crisis.

Las primeras comparecencias de los responsables de Kutxa, BBK y Vital ponían en valor la fusión, precisamente, porque no se estaba en crisis

Antes, el discurso era crecer-crecer y crecer más. Ahora el discurso es hagámosnos fuertes para crecer más.

¿La consecuencia es la misma?

Sí, pero el énfasis es la eficiencia, la reestructuración que se está produciendo en la actividad financiera.

Siempre ha existido.

Porque los márgenes se están reduciendo. La misión fija que la nueva caja será una entidad financiera comprometida con el desarrollo económico, social y medioambiental de Euskal Herria y de las comunidades donde desarrolle su actividad.

La nueva entidad se denomina Caja de Euskadi, pero el ámbito de actuación será el conjunto Euskal Herria, ¿es una estrategia para acercar al mundo abertzale a la nueva caja?

¿De quién es propiedad el concepto de Euskal Herria? No hagamos un problema del nombre. Tuvimos empeño conjunto para que se empleara ese término. Estoy defendiendo el proyecto conjunto para Euskal Herria.

¿Significa que van a elevar la implantación en Nafarroa?

Ya estamos, pero vamos a darle una extensión mayor. En Iparralde ya estamos y, por desgracia, nadie ha conseguido hacer negocio allí. No hay.

¿Por qué no se suma a la Vital?

Tiene hecha la integración de la red informática hace años, sin que estos proyectos estuvieran encima de la mesa. Su integración sería muy rápida. Los órganos de gobierno deben dar el paso para sumarse a la integración de BBK y Kutxa. Eso depende de una negociación política.

¿Se ha producido o se va a producir?

No sé. El PP defiende la plataforma «Vital Sí», que indica que es mejor ir sola que unirse a nuestras sinergias. El PSOE no da su apoyo a la fusión, porque no le interesa el debate antes de las elecciones.

¿Ha negociado el PNV con el Gobierno Zapatero este tema como sí lo ha hecho con la I+D y Euskaltel?

No sé. Los presidentes de BBK y Kutxa han estado con el PSOE, y está a favor de la fusión.

Entonces, no se entiende la situación

Habrá que esperar a las elecciones autonómicas.

¿Después estará despejado el camino?

No lo sé. Hubo un intento en 2005, pero no le aprobaron la fusión a Gregorio Rojo, el presidente de Vital. Ni en 2006, ni en 2007. Vino la crisis financiera y después la económica y, ¡no y no!, no se puede esperar más.

Se habló, sin embargo, de poner sobre la mesa el cambio de ley de cajas para lograr la fusión.

En este momento creo que se va a producir el decantamiento hacia la integración, porque todos vemos que esa unión nos hace ser más fuertes.

Volvemos al inicio de la entrevista, si los presidentes se decantaron por una operación a tres, ¿por qué se hace a dos? ¿Es para presionar a Vital?

No. Porque es lógica. Hay que ver esta operación desde otro punto de vista, porque hay que ver quién tiene más derecho a tomar esta decisión. O es que todo el mundo puede tener derecho al veto indefinidamente.

Esa respuesta me reafirma en la convicción de que han metido presión: o vienes o te quedas sola en el mercado, en el caso de la caja alavesa

No sé. Le dijimos que íbamos a hacerla.

¿Se incorporará Caja Vital pronto a la nueva entidad, si se aprueba en las asambleas ?

Sí. Pero se tienen que poner de acuerdo el PSE y el PNV para cambiar la Ley de Cajas, para que se modifique la composición de los órganos de decisión. Si los partidos se ponen de acuerdo, se dará el paso de integrar a Caja Vital

Si pasan las elecciones y no hay acuerdo, ¿la nueva entidad ampliaría sus oficinas en el territorio de Araba?

Es una decisión que no está tomada. Lo que queremos es que entre la Vital. Llevamos veinte años trabajando en colaboración.

¿Por qué se negocia el acuerdo sólo con CCOO?

Porque la fusión requiere de una mayoría. Sin el concurso de CCOO es imposible llevar la integración a la práctica.

ELA y LAB ponen como condición que se negocie en el ámbito vasco y se tenga en cuenta la representatividad aquí

Como proyecto, lo ofrecemos a todos los trabajadores. No vamos a entrar en ese tema. Tenemos los acuerdos laborales cerrados hasta 2010, que lo resuelvan los sindicatos. En la Mesa Laboral tratamos tema de la fusión, en concreto.

No hay mucha lógica en decir que es una caja de Euskal Herria y después no se aplique ese ámbito a la hora de negociar las condiciones laborales

Si todos ponemos condiciones inasumibles, no habrá acuerdo. CCOO ha aceptado que en la nueva asamblea de 120 miembros haya un marco doble de representación para Euskal Herria y para fuera. En eso no hay problemas legales.

¿Saldrá la fusión?

Garantizamos el empleo, ofrecemos más servicios a los usuarios y damos más seguridad y solvencia a las empresas. Nos falta un voto en Kutxa. Si no lo logramos, no habrá fusión.