Son muchos entrenadores de élite, lo dijo por ejemplo Unai Emery en las páginas de GARA, los que creen que el Athletic ha salido de los problemas clasificatorios en los que se ha visto envuelto en los últimos años debido en buena medida a tres factores: el apoyo de su afición, el compromiso total de sus futbolistas y el peso del escudo. Esta temporada, en la que la caseta es consciente de la dificultad que supone remontar tras un mal inicio, los argumentos para salir del pozo serán idénticos a los de otras experiencias similares.

No faltan quienes aprovechan la situación para cuestionar el compromiso de los futbolistas del Athletic, que obviamente no lo hacen todo bien pero cuyo apego a la entidad es innegable. En otros equipos los problemas se suceden, como el de Ramos y Schuster, o Messi prefiriendo jugar con Argentina que con su club. Aquí todos reman en la misma dirección y ayer lo volvieron a demostrar.