La calzada de los gigantes, un lugar que sólo la leyenda puede llegar a explicar
Leyendas y supersticiones florecen al hablar de los lugares de Irlanda. La Calzada de los Gigantes, una formación basáltica situada en el Condado de Antrim, tiene 40.000 formaciones de basalto que se asemejan a columnas. Cuenta la tradición que fue obra del gigante Fionn Mac Cumhaill.
Soledad GALIANA
Se dice que una imagen vale más que mil palabras, pero en el caso de la Calzada de los Gigantes, ni palabras ni imágenes hacen justicia a una de las maravillas geológicas del mundo. ¿Geológicas? Pues sí, los científicos afirman que la calzada fue formada por una erupción volcánica hace unos 60 millones de años, y que la lava, al enfriarse lentamente, se convirtió en esas cuarenta mil piezas hexagonales que forman la Calzada, una de las ocho maravillas del mundo desde 1700, parte del Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO y además una reserva natural.
Por otra parte, y observando la complejidad del diseño de este acantilado, la leyen-da irlandesa que le da nombre a la zona resuena más verdadera. Según la tradición oral irlandesa, fue el gigante Fionn Mac Cumhaill, el jefe de los guerreros irlandeses Fianna, el que construyó la Calzada. Necesitaba facilitar la visita del gigante escocés Benandonner con el objetivo de llevar a cabo la batalla, que ya vislumbraba como inevitable, para hacerse con la fama del más fuerte en la zona.
Por su tamaño, el escocés Benandonner no podía viajar en barco -ninguno podía soportar su peso- y ello le excusaba de un encuentro con Fionn. Con la Calzada ya acabada, Fionn se puso a otear el horizonte a la espera de la llegada del escocés.
Cuando le vio en la distancia, Fionn se dio cuenta de que Benandonner era bastante más fuerte y grande de lo que esperaba, y desesperado corrió a esconderse en su casa. Su mujer, Oonagh, le preguntó qué ocurría, y aunque Fionn le dio varias excusas, consiguió arrancarle la verdad. Entonces, Oonagh, una mujer muy ocurrente, le propuso un plan. Fionn se vistió como un bebé y se metió en la cama.
Cuando Benandonner llegó a Irlanda, se dirigió a la casa de Fionn para iniciar el encuentro. Oonagh le esperaba a la puerta, y le explicó que Fionn estaba fuera, pero que si quería entrar en la casa, le invitaría a un té siempre y cuando no despertara a su bebé.
Benandonner aceptó la invitación, pero al entrar en la vivienda y ver el tamaño del bebé, se excusó y huyó a Escocia de vuelta, destruyendo la Calzada a su paso para asegurarse de que el padre del gigantesco bebé no le seguiría de vuelta. Y el hecho es que existe una formación geológica similar en Fingal's Cave en Escocia.
Leyenda o ciencia, lo cierto es que la Calzada de los Gigantes es uno de los lugares más visitados en el norte de Irlanda, e incluso durante los treinta años de conflicto los turistas que se echaban en falta en el resto de los Seis Condados siguieron visitando la costa norte de Antrim.
Y es que la visita no es para menos. En ella se pueden admirar las torres verticales imposibles del Órgano del Gigante, las esculturas naturales de los acantilados volcánicos de la Puerta del Gigante o la Chimenea del Gigante, la gigantesca «bota» basáltica que sirve de asiento a los turistas.
Todo ello con un paisaje sorprendente y desafiante en Lacada Point. Este lugar también ha sido testigo de hechos históricos, aunque esta vez poco tienen que ver con gigantes. Lacada Point se cobró la vida de 1.500 tropas con el hundimiento del galeón Gerona el 30 de otubre de 1588. Ocurrió cuando parte de la Armada Invencible con la que Felipe II intentó derrotar a Isabel I de Inglaterra. Al final fueron ellos mismos los que se vieron derrotados por los elementos.
Después del hundimiento de los otros barcos, la tripulación se amalgamó en el Gerona. De todos los miembros de la Armada Invencible, sólo cinco sobrevivieron al hundimiento. Según cuenta la tradición oral se quedaron en Irlanda, como lo hicieron las víctimas en el cementerio de St. Cuthbert cerca del Castillo de Dunluce, donde se encuentran algunos de los cañones del galeón.
El lugar donde se encontraron los restos de naufragio y los cuerpos de los soldados pasó a conocerse como Port na Spaniagh. Según explica la gente del lugar, en un pasado había una montaña de huesos a escasos metros de la orilla. Los vecinos lo conocían como «los huesos del español».
En la zona también hay un círculo megalítico. La historia que lo envuelve saca a relucir la superstición irlandesa, heredera de las creencias celtas y que ni siquiera el cristianismo más extremo ha logrado desarraigar. Según atribuye la superstición, el círculo no es otra cosa que la tumba de Oisin. Este personaje es uno de los hijos de Fionn, que viajó a la tierra de la eterna juventud. Hizo el viaje acompañado de Niamh y volvió a Irlanda para morir al tocar la tierra. Pues su tumba es el pequeño circulo megalítico que se encuentra en las cercanías de Cushendall.
Y es que las supersticiones tienen bastante influencia, a pesar de todo. En el lugar, aún persisten los árboles de la hadas. La idea que envuelve a estos ejemplares es que están a salvo de todos los males, incluida la agricultura intensiva. La maldición que se supone cae en quien los corte ha servido para que se mantengan en pie.
Los visitantes de la zona también pueden hacer frente a diferentes desafíos. Uno de ellos es el cruce del Puente de cuerda de los pescadores de salmón de Carrick. No son palabras menores, ya que el puente se balancea a 80 metros por encima de la altura del mar. El puente es la unión entre la tierra firme y una pequeña isla. Por si fuera poco impresionante, cuando el tiempo es bueno, Escocia se vislumbra al alcance de la mano. Y las vistas son buenas: el paisaje alcanza hasta la hermosa península de Inishowen, en el condado de Donegal.
Otro desafío podría considerarse un trago del whiskey de malta Bushmill en su edición de 21 años. La destilería que lo fabrica está a un viaje en tren de vapor de la Calzada. Y es que el Fuisce o Uisce beatha -que significa agua de la vida en gaélico irlandés- bien merece una visita.
Desde películas y videoclips, hasta cuadros o portadas de discos. Las espectaculares imágenes de La Calzada de los Gigantes han inspirado todo tipo de expresiones. Por ejemplo aparece en la portada del disco de Led Zeppelin «House of the Holy». La calzada en sí no, pero las aguas que la rodean forman la base de la portada The Stone Roses «Bye Bye Badman». El grupo de musical dance Scooter publicó en la cara b de su single «Maria (I like it loud) »una canción titulada «Calzada de los Gigantes». También ha sido escenario de películas o videoclips. Por ejemplo, fue la localización elegida por Marillion para el vídeo de su tema «Easter». Asimismo, aparece en la tercera película de Matthew Barney, «The Cremaster Cycle».
Lugar: Condado de Antrim, en el norte de Irlanda.
Composición: 40.000 columnas de basalto que descienden en forma de escalera hacia el mar.