ELA, LAB y ASPEM rechazan el acuerdo de la mesa laboral alcanzado por CCOO con BBK y Kutxa, al que se ha sumado la plataforma Pixkanaka. El mismo contempla la movilidad geográfica, las salidas anticipadas y jubilaciones, la jornada, la previsión social, los préstamos de vivienda y otros compromisos que «nos parecen rácanos en todos sus aspectos», resalta LAB. A la vez, recuerda que «no tiene validez jurídica ni cuenta con el apoyo mayoritario de los trabajadores». Es, a juicio de LAB, un «caramelo envenenado».

ELA denuncia el «paripé» de la mesa laboral formada para avanzar en el acuerdo previo con el PNV. Con este paso, ambas entidades avanzan hacia la integración, aunque todavía tendrán que obtener dos tercios de las asambleas que se celebrarán el próximo día 28 en Donostia y en Bilbo. CCOO ha anunciado que el lunes ofrecerá una rueda de prensa para informar de todos los extremos.

Desde que se conoció que el PNV había acordado con CCOO la fusión, las centrales sindicales abertzales han mostrado un tono crítico con las direcciones de BBK y Kutxa, porque éstas no han abordado en la mesa laboral temas primordiales como son la aplicación del marco vasco de relaciones laborales para la nueva caja -que utilizará la marca Kutxa- y, por lo tanto, debería de haber contemplado la representatividad en ese ámbito, lo que significaría que el resto de trabajadores que se encuentran en las oficinas de la expansión tendrían que adherirse al acuerdo o fijar uno nuevo para ese ámbito estatal. Esa situación generaba un representatividad diferente en el ámbito natural de las dos cajas.

BBK y Kutxa no han querido «saber nada» de este proceso. Este hecho ha provocado que ELA considere que los contactos en la mesa laboral «han servido para hacer un paripé de negociar un texto ya pactado de antemano por CCOO y el PNV».

Sin mejoras

La central sindical que lidera José Elorrieta afirma que «no ha servido para avanzar en la mejora de las condiciones laborales y salariales de las plantillas de ambas entidades de ahorro en una `mesa' que las propias direcciones de BBK y Kutxa han calificado como extraestatutaria y sin capacidad de negociar y acordar». ELA reitera que en esta fusión «no prima lo social y laboral, sino otros intereses más relacionados con la distribución de las cuotas de poder, previamente acordados en sede política, a costa de las condiciones laborales de los trabajadores afectados por la fusión».

Así explica que «no ha habido voluntad de negociar con nosotros y han ido al acuerdo más barato». Al igual que LAB, la central que dirige Elorrieta, considera que no se han abordado aspectos esenciales «como la homologación de las condiciones laborales, las dobles escalas salariales, la abusiva utilización de las subcontrata y empresas de servicios»

A juicio de ELA, «los acuerdos suscritos entre CCOO y PNV, a los que se ha sumado Pixkanaka, son totalmente insuficientes para los trabajadores de Kutxa y no suponen ningún avance para los de la BBK».

LAB explicó ayer que el acuerdo que se ha firmado está en minoría, porque quienes lo suscriben «representan tan sólo el 45,30% de los empleados votantes de Euskal Herria, por lo que no cuenta con el aval mayoritario de los trabajadores vascos». Con ese nuevo aval de CCOO y Pixkanaka al acuerdo anterior con el PNV, se confirma, a juicio de la central sindical liderada por Ainhoa Etxaide, «que el mismo sólo tiene el objetivo de garantizarse los votos de una parte de la representación sindical en las asambleas del próximo 28 de noviembre».

Mayoría de votos, en contra

LAB afirma que la mayoría de la representación por votos «está claramente en contra». Así, resalta que «se han inventado un marco `mesa laboral' que no tiene ningún valor jurídico, pero eso sí, se garantizan que de ahora en adelante todo se lleva a un marco estatal, alejado de la mayoría de los trabajadores de la nueva caja y de los intereses de éstos, pero que beneficia a CCOO que, con una menor representación en los centros de expansión, tiene un mayor número de delegados sindicales».

La central sindical critica al PNV que, «con tal de conseguir sus objetivos, poco le ha importado hipotecar el marco vasco de relaciones laborales y asumir el marco estatal para asegurarse con CCOO y Pixkanaka el apoyo en las asambleas».

LAB recuerda que en Kutxa los precursores de la integración no tienen los dos tercios de los votos. Llama a la coherencia y pide que una nueva caja en Euskal Herria «contemple el marco vasco. No aceptaremos que se nos imponga el estatal. Vamos a seguir defendiendo el marco vasco por encima de otros intereses como los que preservan PNV y CCOO».