Aubry y Delanöe tratan de aliarse para oponerse a Royal por el control del PS
La alcaldesa de Lille y rival de Ségolène Royal para liderar el Partido Socialista francés, Martine Aubry, tendió la mano a las otras corrientes de la formación para superar los «matices» que les separan y unirse en torno a un proyecto político para oponerse a la ex candidata presidencial. Royal volvió a defender una alianza con el centro y propuso someter esta cuestión, principal escollo entre las distintas corrientes, a una «consulta directa» entre la militancia.
GARA |
La ex ministra y alcaldesa de Lille, Martine Aubry, y el alcalde de París, Bertrand Delanöe, se lanzaron ayer mensajes públicos para intentar una alianza contra la ex candidata presidencial Ségolène Royal, para hacerse con el control del Partido Socialista (PS) francés.
Aubry justificó su negativa a apoyar la candidatura de Royal para el puesto de primer secretario del PS porque dijo que en su propuesta no hay «coherencia», durante la segunda jornada del congreso del PS que se celebra en Reims (norte del Estado), en un ambiente cargado de electricidad.
«Un partido para existir debe tener una línea clara, apoyada en una mayoría fuerte», señaló la alcaldesa de Lille en una crítica apenas velada a la presidenta de la región Poitou-Charentes, que a última hora del viernes oficializó que postula para el puesto de primer secretario, cuyo nombre saldrá del voto de los militantes el próximo día 20.
Aubry no dijo ante el plenario del congreso si ella misma se presentaría, porque su estrategia es tratar de reunir a las otras dos mociones que, como la suya, obtuvieron menos votos que la de Royal (que se colocó en cabeza con el 29% de los sufragios) en una primera consulta de los militantes el pasado día 6.
Señaló que su moción, la de Delanöe y la del ala más izquierdista del partido, encabezada por el eurodiputado Benoît Hamon, deben intentar juntarse y lo justificó porque «ahora es la línea política la que hace las alianzas».
«Partido de izquierda»
«Debemos elegir a un equipo y a un capitán para el que PS vuelva a ser un partido de izquierdas», declaró Aubry, que criticó en particular a Royal por su disposición a establecer alianzas con el partido centrista MoDem, liderado por François Bayrou. A juicio de la primera, que esa posibilidad, el MoDem «no tiene un proyecto de sociedad compatible con el nuestro», aunque a continuación indicó que se puede estar abierta a esa formación dirigida por Bayrou, «con condiciones».
Royal, que le había precedido en el discurso, anunció que propondrá «una consulta directa de los militantes sobre la cuestión de la alianza», porque así «esa cuestión no podrá servir de pretexto de rechazo» de su moción.
«¿Tan débiles estamos que la sola idea de una eventual alianza nos saca de nuestras casillas cuando algunos de nosotros ya la practica en casa?», señaló con ironía la ex candidata presidencial en alusión a los que negocian unirse contra ella.
Delanöe, cuya moción el pasado día 6 quedó en un segundo lugar con el 25% de los votos de los militantes, justo por delante de la de Aubry (24%) y de la de Hamon (18%), pidió a éstos "compromisos" para una "unión mayoritaria" contra Royal.
El alcalde de París aseguró que no tiene «ningún interés personal» en este congreso, en lo que pudo entenderse como que renunciaba a ser él mismo pretendiente de la responsabilidad de primer secretario, y señaló que «con nuestro 25% pongo todas mis fuerzas a disposición del PS».
En una carga contra Royal, señaló que en las elecciones al Parlamento del año próximo, su partido debe aliarse «con los socialdemócratas europeos».
Uno de los grandes problemas para constituir la unión contra Royal de todas las otras ponencias de cara al final, hoy, del congreso, es encontrar a una persona aceptable para todos.
Otro es que Hamon reiteró ayer que no retira su candidatura al puesto de primer secretario por «una línea política».
El representante del ala más izquierdista indicó que en el PS hay «dos visiones del partido», una basada en «una unión del tipo del Partido Demócrata Italiano», en referencia a Royal, y otra que «privilegia la existencia de un gran partido de izquierdas».
«No es un combate de persona, no soy candidato contra Ségolène. Soy candidato en nombre de una visión política, de una estrategia y de un proyecto», argumentó Hamon.
En su intervención, Ségolène Royal volvió a defender un acercamiento al centro y abogó por un «nuevo Frente Popular». Tenía previsto presentar formalmente ayer propuesta en la Comisión de Resoluciones del PS, que durante la noche se iba a reunir para elaborar una síntesis de las distintas mociones.
Bertrand Delanöe advirtió de que una alianza con el centro pondría en peligro la «supervivencia de la identidad» del PS. «No podemos construir una alternativa (...) con fuerzas política que dicen que la izquierda y la derecha son la misma cosa», afirmó.