¿Quién va a poner dinero en la Real si encima lo denuncian?
Joseba ITURRIA
Cuando a un niño maleducado le piden que devuelva algo que no es suyo y que ha convertido en su juguete se corre el peligro de que intente destrozarlo para que nadie pueda jugar con él. Esa sensación tiene uno tras ver ayer publicado en NG detalles de la doble contabilidad, del caso Sunday Morning y del sponsor que permite devolver los 100.000 euros que un guipuzcoano cedió sin intereses para ayudar a la Real a seguir en Primera.
Este periodista tiene esa información desde hace tiempo pero no la publica porque perjudica a la Real, el mismo motivo por el que no lo publicó cuando conoció que Badiola había pagado 150.000 euros a un agente para que denunciara a Lorenzo Sanz. Lo malo no es que otro periodista tenga un criterio distinto, sino que el presidente de la Real perjudica a su club con su denuncia. Es inaudito. Que el responsable de una sociedad la autodenuncie demuestra lo que le importa la Real a Badiola.
Sunday Morning sólo es una operación para llegar a un acuerdo con un jugador que pierde dinero por venir a la Real y Astiazaran acepta una fórmula de pagarle lo que al final acuerda sin declarar toda su ficha. Un caso casi único en la Real y habitual en el fútbol. Buena parte de los contratos de muchos jugadores se pagan con el dinero negro que algunos empresarios vehiculizan al mundo del fútbol.
Y en un momento en el que falta dinero para sobrevivir denuncia una práctica de no pagar el IVA que permite a su club disponer de más recursos con los mismos ingresos de abonos. También denuncia que se convertía en dinero B una cantidad ridícula en comparación con otros clubes que salía de parte de los ingresos de las tiendas, algo que confirma la nula capacidad del club para generar dinero negro a diferencia de otros rivales.
Y es una práctica con la que Fuentes acaba, lo que provoca un problema muy grande cuando el equipo lucha por evitar el descenso y desde dentro se le trasmitía al Consejo que otros rivales no sólo pagaban primas a terceros, también a segundos por dejarse ganar y se le pide que prime a terceros. Respondió que no había dinero B y no se podía. Al final una persona ayuda a la Real, un sponsor permite devolver el dinero y el presidente del club lo denuncia y le pone en serios aprietos fiscales. Luego la gente se quejará de que nadie pone dinero...
Porque alguno se escandaliza porque no se declaraba el IVA para disponer de más recursos, porque existió dinero B en la Real, porque se pagó a un jugador una parte de su ficha sin declararla y porque se compraban medicinas no dopantes para mejorar el rendimiento y recortar los plazos de baja por un valor también ridículo para lo que se mueve en el deporte profesional.
Pues la Real compite con unos rivales que hacen eso a gran escala y cuando dejó de hacer lo poco que hacía bajó. La Real necesita una profunda reflexión. Por su capacidad de generar ingresos, habrá unos quince clubes que le superen en Primera y, cuando vuelva, lo normal es que en la mayoría de los años le toque luchar por no bajar y, cuando baje, por intentar subir. Ese ha sido el sino de la Real casi siempre. Y en esa lucha todos los años sus rivales van a pagar primas. ¿Quién va a poner dinero en la Real si cada uno que lo dona de verdad, sin quedarse con los derechos de un jugador para recuperarlo, sale escaldado?