El martes se celebrará en todo el mundo el Día contra la Violencia hacia las mujeres y, un año más, los datos que se ofrecen a la opinión pública no son nada esperanzadores. «Este año cinco mujeres han sido asesinadas y en los últimos meses hemos visto casos muy graves de violaciones y agresiones múltiples». Con estos datos presentes, representantes de la izquierda abertzale subrayaron que «la alarma roja» está encendida y por lo tanto, «es hora de hacer frente a la violencia sexista e ir a la raíz del problema».

En una comparecencia ante los medios, Marian Beitialarrangoitia, Idoia Ibero e Itziar Lopategi afirmaron que, con motivo del Día Internacional contra la Violencia hacia las mujeres, las fuerzas políticas «desarrollan un discurso `políticamente correcto'» y que con él pretenden «esconder la responsabilidad política que tienen las instituciones e invisibilizar que la violencia contra las mujeres es consecuencia directa del sistema patriarcal». En su opinión, éste debe ser un día de lucha, denuncia y compromiso político ya que la violencia contra las mujeres es uno de los problemas políticos y sociales más graves del mundo y de Euskal Herria.

Se mostraron preocupadas porque entre los y las jóvenes se siguen reproduciendo los roles tradicionales y las relaciones de poder y, en ese sentido, afirmaron que la coeducación no es un aspecto que se trabaja en la educación de una manera integral y sistemática.

Lo que realmente es necesario, a su juicio, es una transformación social, «un proceso que supere el marco actual y nos lleve a un nuevo escenario, donde los derechos de las mujeres sean reales y no formales, donde los derechos de las mujeres se respeten y garanticen».

Tal y como afirmaron las representantes de la izquierda abertzale, es necesario definir y abordar una política feminista integral que tenga como objetivo eliminar todas las situaciones de discriminación que sufren las mujeres. Asimismo, incidieron en que es preciso superar la actual política de carácter meramente asistencial y desarrollar una política basada en la coeducación y en la prevención integral en el ámbito sanitario, laboral y de servicios... así como impulsar una política de respuesta global.

Aun así, en su opinión, lo fundamental para construir una Euskal Herria feminista es la lucha y la organización de las mujeres y la implicación de toda la sociedad. En ese sentido, hicieron un llamamiento a las movilizaciones que se celebrarán pasado mañana en numerosos puntos de Euskal Herria.

Marcha hasta Sestao

Por otro lado, diversos colectivos de Ezkerraldea y Mehatzaldea realizaron una marcha desde Barakaldo hasta Sestao bajo el lema: «Ninguna agresión sin repuesta». Con esta iniciativa exigieron que se propicien «cambios que nos empujen hacia una sociedad más igualitaria, impulsando la prevención a nivel educativo, cultural, social, laboral, económico y político».

También solicitaron que se atiendan las necesidades concretas de las mujeres víctimas de la violencia sexista, tales como prestaciones económicas rápidas, centros de asesoramiento de urgencia o pisos de acogida que, según el decreto del Departamento de Vivienda y Asuntos Sociales de Lakua, aprobado en setiembre, son obligatorios para todos los municipios con más de 20.000 habitantes. También pidieron «atención sicológica específica individualizada y en grupo, en casos necesarios, servicio que no cubre Osakidetza».